14.04.2017 Views

Delirium

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

veo hasta que estemos curadas. De repente, el miedo se apodera de mí; desearía que fuera posible dar<br />

marcha atrás en nuestra conversación, retirar todas las cosas mezquinas o sarcásticas que he dicho,<br />

decirle que la echo de menos y que quiero que volvamos a ser amigas otra vez.<br />

Pero justo cuando estoy a punto de abrir mi corazón, me hace un gesto rápido de despedida y dice:<br />

—Venga, vale. Nos vemos —y así, el punto de inflexión desaparece, y con él mi oportunidad de<br />

hablar.<br />

—Vale. Hasta luego.<br />

Hana comienza a andar y yo me quedo mirando cómo se marcha. Noto la urgencia de memorizar su<br />

paso, de imprimírmelo en la memoria de algún modo, justo así como es ella. Pero mientras la veo<br />

titubear entre la poderosa luz del sol y la sombra, su silueta se confunde en mi mente con otra, una silueta<br />

que entra y sale de la oscuridad, a punto de saltar del acantilado, y ya no sé a quién estoy mirando. De<br />

repente, los bordes del mundo se vuelven borrosos y siento un dolor agudo en la garganta, así que me doy<br />

la vuelta y camino deprisa hacia casa.<br />

—Lena —me llama, justo antes de que llegue a la cancela.<br />

Me giro con el corazón dando saltos. Quizá sea ella la que lo diga: «Te echo de menos. Volvamos a<br />

ser amigas».<br />

A pesar de los quince metros que nos separan, noto que vacila. Luego hace un gesto leve con la mano<br />

y grita:<br />

—No importa.<br />

Esta vez no titubea cuando se da la vuelta. Camina rápidamente hacia delante, dobla una esquina y<br />

desaparece.<br />

¿Pero qué esperaba yo?<br />

Ese es el quid de la cuestión, después de todo. No se puede volver atrás.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!