10.05.2013 Views

el cristianismo y las grandes religiones de oriente - FUNDACIÓN ...

el cristianismo y las grandes religiones de oriente - FUNDACIÓN ...

el cristianismo y las grandes religiones de oriente - FUNDACIÓN ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Ya no es la suprema virtud una sagrada indiferencia, ni la liberación en <strong>el</strong><br />

aislamiento, «<strong>el</strong> hacerse Brahman», es <strong>el</strong> fin supremo, sino la unión y la comunión con<br />

Dios en <strong>el</strong> lazo d<strong>el</strong> amor. Ésta, como explícitamente afirma <strong>el</strong> texto (18, 64), es la<br />

«suprema y más secreta <strong>de</strong> todas <strong>las</strong> doctrinas» <strong>de</strong> Krishna. Y así, por primera vez, se<br />

les proclamó a los hindúes <strong>el</strong> mensaje d<strong>el</strong> amor <strong>de</strong> Dios.<br />

El Bhagavad-Gita marca una divisoria en la historia d<strong>el</strong> hinduismo, porque hasta<br />

nuestros días la r<strong>el</strong>igión viva d<strong>el</strong> pueblo indio consiste en <strong>el</strong> bhakti en sus diversas<br />

formas-. Se manifiesta como una <strong>de</strong>voción amorosa, como una adoración, una comunión<br />

y unión con Dios que se manifiesta a sí mismo como, Vishnu o Shiva. Porque para los<br />

hindúes cultos esos dos dioses en última instancia san <strong>el</strong> mismo; son aspectos distintos<br />

<strong>de</strong> la misma inefable realidad, vista, por así <strong>de</strong>cir, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> diferentes ángulos.<br />

VISHNU Y SUS ENCARNACIONES<br />

De los <strong>gran<strong>de</strong>s</strong> dioses, o, como prefieren <strong>de</strong>cir los hindúes, <strong>de</strong> <strong>las</strong> dos <strong>gran<strong>de</strong>s</strong><br />

manifestaciones d<strong>el</strong> único verda<strong>de</strong>ro Dios, Vishnu es <strong>el</strong> que <strong>de</strong> cuando en cuando se<br />

encarna en la tierra «para la protección <strong>de</strong> los buenos y la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> los<br />

malhechores, y para <strong>el</strong> restablecimiento <strong>de</strong> la ley (dharma)». Ordinariamente se cuentan<br />

hasta diez encarnaciones <strong>de</strong> Vishnu, algunas en forma animal y otras en forma humana,<br />

pera <strong>las</strong> más importantes son dos. Son sus encarnaciones como, Rama y como Krishna.<br />

De éstos, Rama es quizá <strong>el</strong> menos interesante: es <strong>el</strong> i<strong>de</strong>al d<strong>el</strong> caballero indio, leal,<br />

paciente en la adversidad, obediente a la autoridad superior, que castiga a los po<strong>de</strong>res<br />

d<strong>el</strong> mal, <strong>el</strong> marido, hijo y hermano i<strong>de</strong>al. La <strong>de</strong>voción que se le tributa tien<strong>de</strong> a ser más<br />

restringida y sobria que la que se otorga a Krishna, y esto en plena concordancia con su<br />

carácter.<br />

Krishna es más complejo, porque <strong>el</strong> Krishna que encontramos en la gran epopeya<br />

(<strong>de</strong> la que forma parte <strong>el</strong> Bhagavad-Gita) es diferente d<strong>el</strong> Krishna <strong>de</strong> la <strong>de</strong>voción popular.<br />

Ya en la misma epopeya Krishna es indócil y caprichoso y en la gran guerra entre <strong>las</strong><br />

Pandavas y los Kauravas no se abstiene <strong>de</strong> acudir a estratagemas que escandalizan a<br />

sus hermanos y <strong>de</strong> <strong>las</strong> que luego se avergüenza. Terminada la guerra y victoriosos los<br />

Pandavas - aunque la matanza ha sido tan terrible que les queda muy poco sobre qué<br />

reinar -, Krishna se vu<strong>el</strong>ve a su tribu; y su muerte es trágica. Porque apenas llegado a<br />

casa los hombres <strong>de</strong> la tribu, bajo la acción d<strong>el</strong> vino, enloquecen y se arrojan unos<br />

contra otros, matándose hasta <strong>el</strong> último. Krishna, entristecido y aparentemente<br />

fracasado, se retira a la orilla d<strong>el</strong> mar a meditar. Un cazador que pasaba por allí, confundiéndolo<br />

con una gac<strong>el</strong>a, le disparó y le alcanzó en <strong>el</strong> talón, aunque, como dice la<br />

epopeya, siendo Dios, podía fácilmente salvarse a sí mismo. El aparente fracaso d<strong>el</strong><br />

Dios encarnado y su subsecuente ascensión al ci<strong>el</strong>o para volver a tomar su reino, no<br />

pue<strong>de</strong>n sino traernos al pensamiento la pasión, resurrección v ascensión <strong>de</strong> nuestro<br />

Señor.<br />

El Krishna <strong>de</strong> la <strong>de</strong>voción popular, sin embargo, es muy distinto d<strong>el</strong> Krishna <strong>de</strong> la gran<br />

epopeya. Se nos presenta como un joven guapo y díscolo, educado entre vaqueros, y<br />

sus aventuras con <strong>las</strong> hijas <strong>de</strong> los vaqueros, enloquecidas por su amor, son <strong>el</strong> tema <strong>de</strong><br />

interminables historias. Estas historias, según dicen, son alegorías d<strong>el</strong> amor <strong>de</strong> Dios por<br />

<strong>el</strong> alma humana y d<strong>el</strong> amor d<strong>el</strong> hombre para con Dios; y este amor es apasionado, ya<br />

que <strong>el</strong> alma es incapaz <strong>de</strong> aguantar la separación <strong>de</strong> su amor ni por un solo momento.<br />

En <strong>el</strong> culto a Krishna se abandona completamente <strong>el</strong> i<strong>de</strong>al <strong>de</strong> la «imperturbabilidad» d<strong>el</strong><br />

budismo y d<strong>el</strong> hinduismo primitivo. En don<strong>de</strong> está <strong>el</strong> amor ha <strong>de</strong> haber <strong>de</strong>dicación y<br />

pasión, y aun <strong>el</strong> filósofo Ramanuja, <strong>el</strong> primero y <strong>el</strong> mejor apologista int<strong>el</strong>ectual <strong>de</strong> los<br />

cultos d<strong>el</strong> bhakti, <strong>de</strong>clara que Dios tampoco pue<strong>de</strong> soportar la separación d<strong>el</strong> alma.<br />

20

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!