Untitled - Defensor del Pueblo

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Derechos Humanos y Asamblea Constituyente, tomar el cielo por asalto
sea deconstruye los saberes internamente, y puede reconfigurar otro cierre, en
los términos de Weber, explicados anteriormente.
La deconstrucción, ya sea interna o externamente, pone en juego la noción de
poder. El poder fluye, precisa de dispositivos para redistribuirse, para ejercerse. La
configuración de un espacio de poder precisa de la configuración de un espacio
de saber que lo legitime, puesto que no hay ejercicio de poder sin un espacio de
saber que pretenda legitimarlo. La deconstrucción exhibe la estructura básica del
ejercicio de poder, los cierres que se dieron, los efectos en su lado más extremo,
más capilar, menos teórico y más de hechos, de violencia explícita.
Pero para que la deconstrucción pueda fluir y no se presente como engañosa
debe negar toda autoridad de referencia, todo lugar y nombre de la verdad.
Debe haber un vaciamiento de dispositivos del poder, para reconstruir los
dispositivos de ejercicio.
La Asamblea Constituyente puede (o no también) ser ese espacio de
indeterminación en el que sea posible deconstruir y reestructurar los dispositivos
de agenciamiento del poder, todo depende del ejercicio de ese poder que
proviene de ese vacío, de ese exterior constitutivo.
La condición política se encuentra en que pueda ponerse en suspenso el
régimen de verdad, el régimen de autoridad.
Democracia
Es necesario, como último punto, referirse a la Democracia. Más allá del
término (demos: pueblo, y cratos: poder), más allá de las teorías de la democracia
representativa o participativa, del deber ser o del ser de la Democracia, es
necesario observar a la democracia como parte de este replanteamiento
discursivo.
La democracia es aquel espacio o campo de la querella que permite la
gestión del conflicto, es aquel espacio que posibilita el disentimiento con el
orden de verdad vigente, pues llevar propuestas contrarias al régimen de verdad
es democrático, no se puede concebir que en democracia se jerarquice o se
prohíba el disentir. La democracia en consecuencia es mucho más que elecciones,
es mucho más que reglas y normas, la democracia es una forma de vida. Las
sociedades complejas, como la boliviana, son sociedades que precisan de la