Untitled - Defensor del Pueblo

Así, el imaginario democrático se expresa en el despliegue de un conjunto
de dispositivos de movilización plural de la sociedad boliviana, que buscan
sustentar de manera permanente a las instituciones y a los poderes públicos
estatales. La presión de la sociedad a los poderes públicos se ejerce en dos niveles:
a) a nivel de la definición de la estructura básica de la sociedad en general; es
decir, de los principios y valores que constituyen a la comunidad política, su
sustancialidad ya sea multinacional, plurinacional o intercultural y,
b) a nivel de las formas de autogobierno y gestión de los problemas, así
como en asuntos públicos y colectivos.
Es en estos dos incisos donde se debaten las corrientes de comunitarismo y
liberalismo; el primero, bajo el planteamiento de la comunidad y el ejercicio de
derechos sociales como base del ejercicio de los derechos individuales; mientras que
en el segundo la postura liberal enfatiza en los derechos individuales de la persona,
en las garantías del ejercicio de la libertad y en realidad ante el Estado.
Ambas corrientes pueden ser adoptadas en el margen de creatividad de la
reinvención de la política como gestión de ambas posturas, sin embargo este
acápite de la reinvención política se desarrollará más adelante desde una matriz
agonística.
Respecto de la definición de la estructura básica de la sociedad, se sostiene
que la participación igualitaria de actores es la base fundamental de la organización
política. De ahí que el concepto de igualdad, como reconocimiento de los
miembros de la comunidad de sujetos con derecho a tener derechos, es la fuente
de la movilización democrática y, a la vez, conflictiva en todos los niveles e
instancias de la organización política. Esta noción de democratización, como
pedido de las movilizaciones sociales, posiblemente se encuentre ligada a la
memoria de la construcción de la democracia; no debe olvidarse que en Bolivia,
durante mucho tiempo, el espacio de ejercicio de los derechos de ciudadanía
estaba mediado por las organizaciones sociales, sindicatos y la misma Central
Obrera Boliviana (COB), es decir, se tiene como base de sedimentación de esta
propuesta en construcción a las distintas conquistas en materia de democracia
de los movimientos y organizaciones sociales. Incluso la vertiente comunitarista
ha señalado reiteradamente que la conquista de la democracia en Bolivia no fue
cuarenta y siete