cuaderno de actividades filosofia 2 - Sitio del grupo Web
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FILOSOFÍA II<br />
Esta <strong>de</strong>signación que tiene el valor <strong>de</strong> una etiqueta, pue<strong>de</strong> inducir, a quien afronte el<br />
fenómeno existencialista por primera vez, a creer que se caracteriza por la elección<br />
privilegiada <strong>de</strong> la existencia como su objeto propio, en lugar <strong>de</strong> la esencia, <strong>de</strong>l espíritu, <strong>de</strong> la<br />
materia, <strong>de</strong> Dios, <strong>de</strong> la sociedad.<br />
Nada más inexacto. Pues precisamente, al contrario, la existencia tiene para el<br />
existencialismo el carácter fundamental <strong>de</strong> la inobjetivabilidad: la existencia es lo que no<br />
pue<strong>de</strong> jamás ser objetivado, contrapuesto como objeto a un sujeto que filosofe, porque es,<br />
por el contrario, la naturaleza constitutiva <strong>de</strong> este mismo sujeto.<br />
Pero si la existencia es la naturaleza <strong>de</strong>l sujeto que filosofa, y como tal está caracterizada<br />
por la imposibilidad <strong>de</strong> ser objetivizada, se sigue que es propia exclusivamente <strong>de</strong>l único<br />
sujeto que filosofa, conocido <strong>de</strong> nosotros, el hombre.<br />
Este segundo carácter <strong>de</strong> la existencia sustrae el término a su uso tradicional, en virtud <strong>de</strong>l<br />
cual, como opuesto a la esencia, servía para <strong>de</strong>terminar todos los seres dotados <strong>de</strong> realidad<br />
actual (Dios, el árbol, el hombre, la nube, etc.).<br />
La existencia es inobjetivable y es propia exclusivamente <strong>de</strong>l hombre. A estos dos<br />
caracteres se une inmediatamente un tercero. La existencia es un modo <strong>de</strong> ser finito. La<br />
finitud <strong>de</strong> la existencia está estrechamente unida con su inobjetivabilidad e imposibilidad <strong>de</strong><br />
ser generalizada; estos dos caracteres son, en efecto, <strong>de</strong>terminaciones limitativas y<br />
negativas <strong>de</strong>l ser que <strong>de</strong>finen: dicen lo que la existencia no es ni pue<strong>de</strong> ser.<br />
En el corazón mismo <strong>de</strong> la existencia anida un no-ser, y esto explica el peso <strong>de</strong>cisivo que<br />
la negación y la nada tendrán en el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la problemática existencial. Aquí baste<br />
observar que lo negativo es para el existencialismo un carácter constitutivo <strong>de</strong> la realidad<br />
existencial y no una <strong>de</strong>terminación secundaria, conexa con nuestro modo <strong>de</strong> ver lo positivo<br />
o con la dialéctica a través <strong>de</strong> la cual lo positivo toma conciencia <strong>de</strong> sí.<br />
Inobjetivabilidad, imposibilidad <strong>de</strong> ser generalizada, finitud y negatividad son, pues, los<br />
caracteres fundamentales que la existencia asume en una problemática existencialista. Pero<br />
estos caracteres, aunque sirven para i<strong>de</strong>ntificar a aquel ser a quien se reserva la existencia,<br />
no nos dicen nada sobre su modo <strong>de</strong> ser. En otras palabras, estos caracteres <strong>de</strong>finen la<br />
existencia en el plano <strong>de</strong> una <strong>de</strong>finición externa, en el plano <strong>de</strong> contraposición con otros<br />
seres (plano óntico), pero no nos dicen nada <strong>de</strong> la unidad interna, <strong>de</strong>l modo <strong>de</strong> ser <strong>de</strong> este<br />
ente (plano ontológico).<br />
La cuestión en torno al “modo <strong>de</strong> ser” expresa la dimensión categorial <strong>de</strong> la problemática<br />
existencialista. No-objetivabilidad, no generalización, finitud, negatividad son los caracteres<br />
ónticos <strong>de</strong> ese ser que es el hombre. ¿Pero cuál <strong>de</strong>be ser el modo <strong>de</strong> ser <strong>de</strong> este ente para<br />
que pueda tener tales caracteres? ¿Cuál el plano categorial en el que se <strong>de</strong>be poner la<br />
indagación a fin <strong>de</strong> que estos caracteres ónticos puedan encontrar inteligibilidad y<br />
fundamento? He aquí la dimensión <strong>de</strong> la problemática existencialista, en cuyo <strong>de</strong>fecto el<br />
existencialismo se resolvería en una mala literatura pesimista o en los <strong>de</strong>sahogos <strong>de</strong>l todo<br />
personales <strong>de</strong> algunas almas solitarias e inútilmente angustiadas, o, todavía, en una moda<br />
muy discutible.<br />
Ahora bien, la constitución <strong>de</strong>l existencialismo, realizada con el pensamiento <strong>de</strong><br />
Kierkegaard, y el nivel filosófico <strong>de</strong> sus <strong>de</strong>sarrollos sucesivos, están inseparablemente<br />
unidos con la categoría <strong>de</strong>l posible como modo <strong>de</strong> ser constitutivo <strong>de</strong> la existencia. El modo<br />
<strong>de</strong> ser <strong>de</strong> la existencia no es la realidad ni la necesidad sino la posibilidad.” (Pietro Chiodi,<br />
El Pensamiento Existencialista, Uteha, 1980, pp. 23-24)<br />
CUADERNO DE ACTIVIDADES DE CONSOLIDACIÓN Y RETROALIMENTACIÓN<br />
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