Pulsa aquà para descargarte y seguir leyendo ... - La Web Cristiana
Pulsa aquà para descargarte y seguir leyendo ... - La Web Cristiana
Pulsa aquà para descargarte y seguir leyendo ... - La Web Cristiana
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
221<br />
De allí que una iglesia vigente, hoy, tiene que estar necesariamente en Internet. <strong>La</strong> tecnología<br />
del microprocesador es el combustible de la reforma post moderna. Internet es, (Más allá de todas<br />
sus perversiones), el vehículo número Uno <strong>para</strong> mover información sobre el planeta.<br />
Durante años estuvimos convencidos que, cuando repetíamos como en una letanía la clásica<br />
Palabra de que sería predicado este evangelio hasta el último confín de la tierra, eso tenía relación<br />
con la esforzada labor de los misioneros. Sin embargo, todavía hoy son muchos los que no han<br />
entendido que la televisión vía satélite y las redes de Internet se han sumado a esos misioneros <strong>para</strong><br />
hacer efectiva esa Palabra profética.<br />
Pero más allá de estos vericuetos culturales, hay un elemento sumamente específico que<br />
tiene gran validez y gravitación en la vida futura de lo que llamamos iglesia. Y ese elemento, que no<br />
es nuevo ni mucho menos, tiene que ver con la estabilidad que proviene de nuestro interior.<br />
Porque no es fácil de ninguna manera (Ya esto ha quedado dicho) estar viviendo a diario en<br />
Babilonia y no salpicarse con algunas de sus suciedades. De allí que el modelo ideal <strong>para</strong> comenzar<br />
lo que en definitiva será una salida total, es Daniel.<br />
Daniel fue un santo que brilló como refulgente estrella en un ambiente hostil donde él era<br />
absoluta minoría. Y en su libro, además de todo lo que ya conocemos como edificante, hay patrones<br />
claros y muy acertados <strong>para</strong> adoptar como método de vida en nuestro mundo post moderno.<br />
(Daniel 1: 1)= En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino Nabucodonosor<br />
rey de Babilonia a Jerusalén, y la sitió.<br />
(2) Y el Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de los utensilios de<br />
la casa de Dios; y los trajo a tierra de Sinar, a la casa de su dios, y colocó los utensilios en la<br />
casa del tesoro de su dios.<br />
(3) Y dijo el rey a Aspenaz, jefe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del<br />
linaje real de los príncipes, (4) muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen<br />
parecer, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento, e idóneos<br />
<strong>para</strong> estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos.<br />
Entiende bien esto, <strong>para</strong> que no te equivoques ni subestimes: Babilonia siempre está<br />
buscando lo mejor. Si allí dentro tú esperas ser escogido, honrado y hasta privilegiado, deberás<br />
estar en una posición de nobleza real. Si así no fuese, todo te será mucho más cuesta arriba.<br />
<strong>La</strong> iglesia tradicional, mucho más cercana a la genuina, no puede ver el sentido de la<br />
apariencia, pero Babilonia sí. Babilonia es experta en apariencias. Tú ya has visto que Ester se<br />
convirtió en reina de Persia por su belleza física, al margen de sus calidades espirituales.<br />
<strong>La</strong> iglesia tradicional no le encuentra ningún sentido a la belleza y a la educación, pero<br />
Babilonia sí. Es Dios el que en definitiva usará a todo esto <strong>para</strong> servir los propósitos de su Reino.<br />
Babilonia sólo gastará sus recursos <strong>para</strong> entrenar al mejor. De ninguna manera va a invertir en un<br />
mediocre. Babilonia no promueve ni premia la mediocridad. En eso, es mucho más sabia que la<br />
iglesia.<br />
Babilonia hace especial hincapié en los recursos humanos de calidad. Ella los busca<br />
permanentemente. Porque la calidad o la excelencia, implican la más alta seguridad de trabajo en<br />
Babilonia. ¿No hay ministros impecables? ¿No hay bandas de alabanza de altísima calidad? No me<br />
preguntes que tiene que ver con el Espíritu algunas de estas cosas, es lo que hay.<br />
Ser escogidos por Babilonia conlleva adquirir importancia, prestigio y valoración. Se la<br />
denomina como “<strong>para</strong> el Reino”, y no es error, ya que Babilonia es un reino, aunque no el que<br />
pensábamos. Ser saludable, tener buena apariencia, ser educado y operar en excelencia, está muy<br />
considerado en su seno. Es el sinónimo de prestar un gran servicio al Reino.