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cosas35 - The International Raoul Wallenberg Foundation

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largos pasillos en penumbras y para quienes la justicia rabínica guardaba,<br />

por lo menos, el mismo valor que el Código Civil.<br />

No corresponde aquí esbozar los rasgos de su personalidad; tan sólo<br />

nos gustaría recalcar ciertos aspectos que moldearon su carácter: la pasión<br />

(y obstinación) con que defendió sus ideas, sus principios y sus actos; la<br />

inteligencia y el corazón para abrazar libremente “lealtades múltiples” que<br />

logró encarnar con naturalidad y cohesión racional.<br />

No tuvo miedo. No lo tuvo cuando con su mujer embarazada de siete<br />

meses tuvieron que soportar las aguas heladas del Río de la Plata en un<br />

naufragio en el que perecieron más de cien personas y que quizás fuera el<br />

accidente más trágico que haya conocido la historia del Uruguay. No lo<br />

tuvo cuando el régimen militar le impuso la tristemente célebre letra “C”<br />

ni cuando tuvo oportunidad de cooperar con el Centro Simon Wiesenthal<br />

en la persecución de un nazi, prófugo temporariamente en nuestro país.<br />

No lo intimidaron las despiadadas asambleas estudiantiles de principios de<br />

los años 70’ o las de su querido partido Colorado, como aquella en la que<br />

se discutía la privatización de las telecomunicaciones y en la que quedó<br />

solo, abucheado por sus compañeros, y con la posición “minoritaria” votada<br />

solamente por él. Esperábamos verlo deprimido pero volvió a casa con<br />

la convicción de haber defendido lo que entendía justo. Entonces, con una<br />

sonrisa, repitió la sentencia de Gandhi: “Aunque la minoría sea una sola<br />

persona, la verdad sigue siendo la verdad”. Fue un hombre valiente.<br />

En una oportunidad, hace ya más de 10 años, Nahum caminaba con<br />

uno de sus hijos entre las lápidas del cementerio judío de La Paz. Iban leyendo<br />

epitafios y comentándolos hasta que se detuvo y dijo: “En mi caso<br />

no van a tener problema, sólo tienen que esculpir una palabra en la matzeiva:<br />

‘disfrutó’”. No la pusimos pero nos consta que así fue.<br />

Optamos por una ordenación cronológica aunque no en sentido estricto;<br />

en muchos casos nos pareció más adecuado compilar los testimonios<br />

de acuerdo a su unidad temática. Perla Bergstein, Bernardo Schütz y<br />

17<br />

Semblanzas de Nahum Bergstein

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