Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
114 CRIMINOLOGÍA CRÌTICA Y CONTROL SOCIAL<br />
violencia, y, en su seno, la policía es quien tiene el monopolio de la fuerza<br />
en tiempo de paz (Weber, 1984,1988) 9 .<br />
Pero no hay que olvidar que los elementos de este trinomio tienen cierta<br />
tendencia a la autonomía, tanto en cuanto aparato represivo conjunto,<br />
como por separado En tanto que aparato global represivo, forman el<br />
"núcleo duro" <strong>del</strong> <strong>Estado</strong>, y están en condiciones de imponer su voluntad<br />
en el seno <strong>del</strong> propio <strong>Estado</strong>. Por separado, el aparato judicial pugna por<br />
su (proclamada y reconocida en los mo<strong>del</strong>os democráticos) independencia;<br />
la policía, por su parte, debido a su nivel de información, su distribución<br />
y su propia estructura y organización, dispone de una parte <strong>del</strong> poder<br />
<strong>del</strong> mismo <strong>Estado</strong>, de proporciones nada desdeñables 10 .<br />
La policía-aparato construye sus propios ámbitos de relación y su<br />
estrategia. Su sola presencia simboliza una parte de este <strong>control</strong> de <strong>Estado</strong><br />
(orden público-coacción administrativa) y tiende a convertirse, "per se",<br />
no ya en un instrumento, sino en un objetivo, un fin en sí misma, con<br />
dinámica y estrategias propias, si bien con intereses derivados de los de<br />
la clase dominante.<br />
<strong>El</strong> aparato policial se sitúa, por sus características, en una posición<br />
privilegiada dentro <strong>del</strong> sistema represivo de <strong>Estado</strong> al actuar como<br />
elemento de profundización capilar <strong>del</strong> propio <strong>Estado</strong> en la sociedad (a<br />
través de cuya osmosis obtiene además una imagen que le proporciona<br />
la coartada ideológica de la universalidad y perpetuidad). La policía se<br />
configura plenamente como aparato cuando aparece (y es percibida)<br />
como poder/castigadora, en base a las nuevas demandas de <strong>control</strong> <strong>social</strong><br />
apoyadas en las normas y necesidades socio-económicas surgidas en las<br />
sociedades industriales, y a raíz <strong>del</strong> cambio en el modo de producción.<br />
<strong>El</strong> campo de emergencia será entonces, políticamente, el de la aparición<br />
<strong>del</strong> <strong>Estado</strong> y de sus aparatos de <strong>control</strong>; y científicamente, el <strong>del</strong> positivismo.<br />
Del <strong>Estado</strong> entendido como "lugar de encuentro de la lucha política<br />
y como bastión mediante el cual se hace posible implantar un determinado<br />
proyecto de dominación" (Bergalli, 1988, pág. 3) y <strong>del</strong> positivismo en<br />
tanto que soporte teòrico-ideològico de la clase triunfante de las revoluciones<br />
<strong>del</strong> XVIII, cuyo acceso al podertrajo consigo la elaboración de toda<br />
una nueva trama ideológica tendente a demostrar la existencia de unas<br />
9 Vale la pena señalar, en este punto, la quiebra de dicho principio que supone la proliferación de<br />
la seguridad privada (Aguirreazkuenaga, 190).<br />
10 Gleizal ha afirmado en este sentido que "la policía es menos el brazo secular <strong>del</strong> poder que un<br />
pedago de poder" (Gleizal, 1985).