22.04.2018 Views

AA.VV. - Criminología crítica y control social 1. El Poder Punitivo del Estado

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

66 CRIMINOLOGÍA CRÍTICA Y CONTROL SOCIAL<br />

por omisión. La violencia policial directa se traduce en miles de muertos<br />

(no menos de veinte mil anualmente, según cálculos optimistas) por<br />

ejecuciones sin proceso, sea por las policías o por grupos de exterminio<br />

no directamente políticos, a los que cabe agregar las "muertes anunciadas",<br />

las "ejemplarizadoras", etc; a ello debemos agregar el enorme<br />

número de muertos de tránsito, que prácticamente no son tomadas en<br />

cuenta, pese a constituir una de las principales causas de muerte de<br />

adultos jóvenes en la región. En este aspecto es notable la total omisión<br />

<strong>del</strong> sistema penal. Agreguemos a ello las omisiones estatales en la<br />

provisión de alimentación o atención médica elemental en los primeros<br />

meses o años de vida, que cuesta la vida de doscientos mil niños por año,<br />

a lo que cabe agregar un número aproximadamente igual o mayor de<br />

personas que jamás alcanzarán el completo desarrollo psicofísico, por<br />

secuelas de las mismas carencias.<br />

Esta ilusión de tutela que justifica el verdadero o principal ejercicio de<br />

poder <strong>del</strong> sistema penal, se apuntala con el pequeñísimo número de<br />

personas que son seleccionadas y criminalizadas por el sistema penal<br />

formal latinoamericano, que es el que pasa por las instancias jurisdiccionales<br />

y carcelarias. No obstante, en este funcionamiento secundario o de<br />

menor poder <strong>del</strong> sistema penal, dirigido fundamentalmente al condicionamiento<br />

de una limitada clientela, o sea, a una función reproductora de un<br />

nivel justificador de violencia, también son las agencias policiales las que<br />

-contra los enunciados asertivos <strong>del</strong> discurso jurídico-penal-, conservan<br />

el poder selectivo primario. Los jueces, por su parte, ostentan un poder<br />

más aparente que real, esto es, una capacidad selectiva muy secundaria.<br />

Dada la altísima selectividad <strong>del</strong> sistema penal latinoamericano, el número<br />

de <strong>del</strong>itos criminalizados es casi despreciable por ínfimo respecto de la<br />

totalidad incalculable de <strong>del</strong>itos que se cometen, por lo que la arbitrariedad<br />

selectiva es mucho mayor que en los países centrales. Es así como el<br />

legislador latinoamericano no hace más que ampliar el ámbito de arbitrariedad<br />

selectiva de las agencias policiales cuando legisla un nuevo tipo, a<br />

cuyo respecto corresponde recordar que la proliferación de tipos penales<br />

en la región es extraordinaria, especialmente en función <strong>del</strong> enorme<br />

número de leyes penales especiales o descodificadas.<br />

2. Las instancias institucionalizadas <strong>del</strong> sistema penal generan también<br />

su propio mecanismo de retroalimentación, seleccionando y entrenando<br />

pacientemente a sus propios miembros, de una manera que, por lo<br />

general, también es deteriorante, particularmente en lo que hace a la<br />

identidad de las personas. Es importante señalar en este aspecto que la

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!