La Sirena Varada: Año II, Número 14

estrés generan una inmunodepresión
que propicia la sobreexpresión y proliferación
patológica de Herpes simplex.
Con ello se verifica el delicado equilibrio
del sistema inmune ante un ambiente
no sano. Esto sin duda debe ser pauta
para mejorar nuestro estilo de vida y
tomar medidas para limitar los factores
estresantes que esta implica.
IV
Como si se estuviese citando a la Metamorfosis
de Kafka, el hombre de
negocios, la mujer desesperada, el
empresario en aprietos, el médico desquiciado,
el escritor frustrado, la artista
fracasada, el periodista amenazado de
muerte, el político bajo la mira de la
justicia y miles de personas agobiadas
por el mundo moderno despertaron
convertidas en gigantescos virus. La
hipótesis más acertada para explicar
este inverosímil suceso fue la relación
estrés-inmunodepresión y la subsecuente
expresión conjunta de todos
los virus endógenos presentes en el
genoma humano que se expresaron en
una época caracterizada por un ridículamente
alto estrés.
Nadie lo sabía, pero la finalidad última
de los virus, era pasar inalterados
como fósiles químicos, para terminar,
expresándose en conjunto como un virus
colonial y macroscópico.
El mecanismo específico de esta transmutación
humano-virus estaba basado
en una serie de polimorfismos y genes
virales pleiotrópicos que afectaban a distintos
genes hox de los seres humanos,
con lo que las distintas extremidades
fueron sustituidas por amplificaciones
de estructuras virales. Por este descubrimiento
Wlatzen Tiyhg, Adanselmo de Esturión
y Rigoberto Yetattori recibieron en
2048 el premio Nobel de Química.
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