Colección-Bicentenario-Carabobo-3-Blanco-Eduardo-Venezuela-heroica
Eduardo Blanco Venezuela Heroica
Eduardo Blanco
Venezuela Heroica
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Venezuela heroica 117
a los grandes designios de Bolívar, y al afianzamiento de la incipiente
nacionalidad cuyos destinos presidió largo tiempo, al amparo del genio
poderoso y de la espada rayo, que en medio de cien batallas surcaba de
relámpagos a todo el continente.
Menos afortunado, Anzoátegui no alcanzó las alturas a que sus dotes
militares y la nobleza de su carácter le hicieran acreedor: pasó cual un
meteoro. Sin el fin prematuro que le sustrajo de los halagos de una
envidiable gloria, habría sido en el sur, muy digno émulo de Sucre; y la
grandeza de alma y la probada lealtad que le distinguió siempre habrían
servido de poderoso estímulo y de seguro apoyo a la estabilidad futura
de Colombia, a la fijeza de sus instituciones.
Los cuerpos que en la ocasión comandan estos jefes le son fieles; pero
la firmeza y el arrojo que sostenían al ejército, cuando, lidiaba en las
nativas llanuras bajo aquel sol de fuego protector de todas las miserias y
testigo radiante de los más crueles sacrificios, desmaya en el momento
en que las tropas republicanas caen en cuenta del rumbo por donde se
las lleva, y palpan los obstáculos que prevén, con fundada razón, como
insuperables. Muéstranse no obstante, resignados y trepan la agria cuesta
con el vigor y la energía que en toda circunstancia extrema comunicó
el Libertador a cuantos le rodeaban.
Si grandes habían sido hasta allí las penalidades sufridas por aquellos
tenaces lidiadores, mayores eran, y aun más arduas, las que se les ofrecían
en perspectiva en aquella campaña al través de los Andes, desnudos
y descalzos como la emprendían en un clima cuyos rigores contrastaban
con el cálido soplo de las pampas y en la dura necesidad de resistir y
dominar cuantos esfuerzos pudiera hacer para vencerlos, un enemigo
poderoso, práctico del terreno y bien abastecido, como aquel que les
cerraba el paso de la montuosa vía, difícil de vencer y aun más difícil de
recorrerla combatiendo; lo cual era de presumirse sucediera desde luego