Evaluación diagnóstica de las competencias desarrolladas ... - Ifodes

Coll (1986) distingue tres tipos de contenidos de aprendizaje; los
conceptuales, los de procedimientos y los de actitudes que están interconectados,
de manera compleja, en nuestra manera de actuar, es decir en las competencias
que desarrollamos.
Los contenidos conceptuales se refieren a lo que hay que “saber”, en este
grupo hay algunos sencillos, como saber el nombre de alguien, la fecha de un
suceso o los nombres de las partes del cuerpo; otros, más complejos, conocer el
proceso digestivo o las causas de la transformación de la materia.
Los contenidos de procedimientos se refieren a lo que hay que “saber
hacer”, en este grupo se pueden distinguir acciones tan sencillas como abrir la
puerta o complejas como escribir, investigar, obtener conclusiones, entre otros.
Los contenidos de actitudes, se refieren al ser y al comportamiento. Son
conductas que asumimos e interiorizamos, como el respeto, la solidaridad, el
apego a la ley, el interés o la colaboración. Estas se refieren a valores, normas y
actitudes. Los valores son principios normativos que regulan el comportamiento y
se traducen en normas o reglas de conductas que las personas han de respetar
en las diversas situaciones que enfrentan. Las actitudes en cambio, son las
tendencias a comportarse de una manera consistente y perseverante y se
traducen en comportamientos de mayor o menor respeto a los valores y las
normas establecidas.
Es importante señalar que todo aprendizaje es global e influye en las
personas y en su manera de comportarse y de actuar; de ahí que la expresión del
aprendizaje se manifieste en lo que se sabe, lo que se sabe hacer y lo que se es
(entendido como ser persona).El saber, el saber hacer y el ser, son aspectos que
se aprenden, por lo cual deben estar relacionados entre sí.
Así por ejemplo, aprender la técnica para lavarse los dientes o las manos
no se usará adecuadamente si no se sabe el porqué de su empleo, y su
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