La Sabiduría Mágica. Libro III «Mysteria Magica - Ekiria

Denning & Phillips Mysteria Magica 304
Llevar ahora la mano derecha a tocar la izquierda sobre el Pentáculo de la Quintaesencia. A
continuación, bajar las dos manos simultáneamente, de forma que los dedos de la mano
izquierda se ponen ligeramente por encima de la pirámide negra, y de los de la mano derecha
encima de la blanca como antes. Dirigir al Buril la siguiente alocución:
“Contigo sea, ¡Oh Vara!, la bendición de aquel cuya ley dirige a los santos,
la bendición de aquel que reina sin principio ni fin:
contigo sea, como una luz purísima, la bendición del Altísimo.”
Levantar algo las manos y ponerlas horizontales, con as palmas hacia abajo, ligeramente por
encima de la Vara. La mano izquierda permanece delante de la derecha y es levantada un poco
más. Mantener las manos en esta posición mientras se entona:
“en el nombre de éste tu Dios, dígnate dotar a esta Vara con la radiación victoriosa del
Fuego, para que así esté en armonía total con esas Regiones Astrales en las que va a tener
autoridad.
en donde la refulgente llama salta resplandeciendo hasta el corazòn del cielo, confiere a esta
Vara la gloria y el orgullo del Fuego Elemental, para que en las obras en las que participe
desaparezca todo lo accesorio que pueda oscurecer el juicio, para que las materias de los ritos
y pos participantes en ellos sean refinados como el oro y para que abunden los verdaderos
prodigios sin engaño.”
Retirar las manos.
Con la mano derecha, trazar sobre la Vara, primero el sigilo del nombre Atzilútico empleado
en la invocación anterior, y luego el del nombre Briático, vibrando en cada caso el nombre al
tiempo que se traza el sigilo. (Usar para este fin el presigillum del Elemento Fuego y obtener
la línea sigílica del Kamea de Malkuth.)
Proyectar sobre la Vara por medio de la Fórmula del Orante.
Dar con los nudillos un único golpe sobre el Bomos.
Asir el Frasco de Aceite con la mano izquierda y tomar aceite con la yema del pulgar derecho.
Dejar el Frasco. Asir ahora la Vara con la mano izquierda y sostenerla verticalmente justo
por encima del Bomos con la pirámide negra hacia arriba. Ungir la punta de esta pirámide
pasando por ella en pulgar de modo similar la punta de la pirámide blanca. Dar la vuelta otra
vez a la Vara y dejarla sobre el Bomos.
Extender la mano izquierda sobre el palo de la Vara y hacer descansar la mano derecha sobre
el Pentáculo de la Quintaesencia, mientras se dice lo siguiente:
“Mora sobre la Tormenta, ¡Oh Vara!, pero se potente en el Fuego.”