La Sabiduría Mágica. Libro III «Mysteria Magica - Ekiria

Denning & Phillips Mysteria Magica 84
Cuado se presenta éste fenómeno sin estar asociado con ningún tipo de trabajo oculto indica
la necesidad de auto controlar las emociones y buscar una válvula creativa compensadora a
través de las artes o una actividad atlética.
Segundo Nivel
Asuma la Postura de la Vara.
1 - Establezca la respiración rítmica.
2 - Desarrolle la Fórmula dada en el Primer Nivel para energizar los centros de actividad.
3 - Continúe la respiración rítmica.
4 - Visualice que exterioriza sustancia astral desde el plexo solar, un chorro de niebla gris
plateada. Imagine la nube convirtiéndose en una esfera. No visualice nunca gran cantidad de
material gris plateado exteriorizado. Cuando piensa o dice “!Es suficiente!” deje que cese la
corriente.
5 - Para esta práctica inicial, tiene ahora que poner el procedimiento en reversa. Simplemente
visualice que la esfera se convierte una vez más en una nube difusa, luego hálela
completamente a través del hilo que la une al plexo solar, como si bebiera a través de un
sorbito, luego finalmente reabsorba el hilo.
6 - Cuando finalice el proceso, acabe repitiendo la fórmula del primer nivel.
Comentarios
No haga esta práctica si se encuentra cansado. Las primeras veces que haga esta práctica
tendrá un sentimiento de que todo ocurre en su imaginación. Pronto su cuerpo astral
entenderá y hará real sus visualizaciones. Cuando esto suceda agradezca la experiencia, para
que su yo inferior sepa que lo ha hecho bien.
En la proyección Hecateana se proyecta sustancia solo de la Nephesh. La Nephesh es el
término qabalístico para los niveles emocionales o instintivos de la psique: es el “alma no
racional”.
Tercer Nivel
Experiencia extra-corporal Hecateana
1 - Asumir la Postura de la Vara, establezca la Respiración Rítmica.
2 - Desarrolle la fórmula dada en el primer nivel para energizar los centros de actividad.
3 - Exteriorice sustancia astral desde el plexo solar hasta formar una esfera de niebla gris
plateada.
4 - Voluntariamente envié a la esfera, el observador, hacia una persona o lugar del cual usted
desee conocimiento (en la imaginación visual, véalo irse, saliendo por la ventana, la puerta, o
atravesando la pared y desapareciendo a medida que se aleja).
Una orden mental será suficiente, “ve”, “vaya”, etc. Pero la partida del observador debe ser
presenciada siempre por usted.