La Sabiduría Mágica. Libro III «Mysteria Magica - Ekiria

Denning & Phillips Mysteria Magica 97
Océano de Agua. Este brillante Ser era tenido en gran estima por los antiguos griegos, no
sólo como una deidad marina, sino como la matrona de Dionisos.
LEUKOTHEA es la Gran Madre, la MAGNA MATER, la PAMMETEIRA, la madre
de lo divino tanto como de “todas las cosas” inferiores. Benéfica y terrible a un tiempo, se la
conoce como “la rosa blanca con un centro en la oscuridad”; ninguno de los dos aspectos
puede ser dejado a un lado, porque la humanidad ha sido siempre consciente de que junto a su
carácter luminoso y dador de vida tiene también otro, no menos brillante pero fatalmente
magnético. Por otra parte, la Gran Madre es dadora de la iluminación mística, la patrona
divina de las muchas artes, la dispensadora de todos los bienes. Por otra, representa el
atractivo de las profundidades, la satisfacción del deseo de muerte, la hechicera que encierra a
sus víctimas bajo el dominio de lo inconsciente. Los dos aspectos, el brillante y dador de vida
y el oscuro y limitador, vienen representados por AGLAIA y AIANA respectivamente, y
ambos pueden ser interpretados por igual como Virgen o como Madre.
El aspecto oscuro de LEUKOTHEA no está siempre relacionado con el mar de una forma
perceptible, pero nunca son difíciles de encontrar líneas de asociación que los liguen: AIANA
es también Díctina, “La de la red”, a menudo una red cazadora (como la de Diana), pero en
algunos contextos una red de pescar; es asimismo la tela del aspecto Araña de la Madre, pero
en el trasfondo de esta oscura se halla el gran signo maternal de Cáncer.
(Formas Divinas)
LEUKOTHEA. La Gran Diosa viste un peplo blanco brillante con el pliegue superior de la
espalda sobre la cabeza, cubriéndole el pelo. Sobre este velo lleva una diadema de plata con un
único cabujón de berilo en la frente. Su cara es ovalada, de frente despejada y pómulos
pronunciados. Su expresión es de gran dignidad y gentileza. Con la mano derecha sostiene en
forma pacífica y cerca de la hojas – que así no sobresalen por encima del nivel de los hombros
– el palo de la sacratísima Doble Hacha. Las hojas de ésta son de plata, el palo de madera
oscura y en su extremo lleva un brazalete de un diseño especial: sobre cada borde lleva un
ribete de oro puro y el área entre los bordes está llena de delgadas barritas transversales de
diversas piedras: Rojas, verde oscuro, negras, blancas, amarillas y azul intenso. Su brazo
izquierdo está levantado y en la palma está posada una gaviota con las alas extendidas.
Se ve a AIANA a través de una red que cuelga delante de ella, sostenida por dos palomas en
vuelo. Está desnuda y el pelo rubio platino le cae sobre los hombros. En su diadema de plata y
berilo hay entrelazadas algunas flores negras. Lleva el brazalete en la muñeca derecha y abre
los brazos en un gesto expansivo y de bienvenida.
AGLIA lleva un peplo azul oscuro, sin abrochar en el hombro izquierdo y dejando ver el pecho
de ese lado. Su cabello, descubierto, es negro y está suelto. En la cabeza lleva la diadema y en
la muñeca derecha el brazalete. Su mano derecha está extendida, con la palma hacia arriba,
como ofreciendo una lengua de fuego que parece surgir del centro de la palma. Su otra mano
sostiene el pecho izquierdo, también en ademán de ofrenda.