18.05.2013 Views

Descargar - GaliciaAberta | Secretaría Xeral da Emigración - Xunta ...

Descargar - GaliciaAberta | Secretaría Xeral da Emigración - Xunta ...

Descargar - GaliciaAberta | Secretaría Xeral da Emigración - Xunta ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

44<br />

José Lois Estévez<br />

4. EL MANDATO IMPERATIVO Y SUS PROBLEMAS<br />

Al mencionar antes las dificultades prácticas que presentaba la construcción<br />

del man<strong>da</strong>to imperativo, pasando de refilón cuáles fueran, estábamos<br />

retranqueando una cuestión de la mayor importancia. Imaginemos<br />

que un número N de electores otorgan explícitamente su representación<br />

a un diputado, que le comunican instrucciones por escrito y que se reservan<br />

la prerrogativa de revocarle el man<strong>da</strong>to en ciertas hipótesis. Nadie<br />

podría negar que esta forma de representación sería la más genuinamente<br />

democrática y la menos mediatizable o manipulable. ¿Por qué, entonces,<br />

no se la practica, sin más? ¿Por qué inventar procedimientos complicadísimos<br />

de matemáticas electorales cuando esta forma es tan sencilla y tan<br />

satisfactoria para los representados? Amén de sus efectos sobre el sistema<br />

de partidos, por las dificultades con que tropieza su realización consecuente.<br />

Veamos algunas:<br />

a) Para mantener el principio haría falta, ante todo, conocer por<br />

anticipado qué número de personas y bajo qué condiciones ca<strong>da</strong> una<br />

tendrán derecho a designar un representante. Y antes aún, ¿quién<br />

deberá decidir, ab initio, en estos temas?<br />

b) En un grupo de representados, por pequeño que sea, tendrá que<br />

haber, a menudo, opiniones, convicciones e intereses incompatibles.<br />

Estos podrán no trascender al cuaderno de instrucciones escritas<br />

que se den al representante; pero, por minuciosas que quieran<br />

por los jueces. “Si el legislador creara el Derecho, el error jurídico no sería posible. De ca<strong>da</strong><br />

ley o disposición habría que decir, como el Génesis, de ca<strong>da</strong> obra divina en los diversos días de<br />

la Creación: *Vió Dios que era buena..*” Lois: La eterna polémica sobre las fuentes del Derecho,<br />

Santiago, 1994, 89. Pero el error es la más constante reali<strong>da</strong>d humana. Cuando se valoran<br />

histó ri camente las aportaciones de los más grandes sabios a nuestro acervo cultural, sus descubrimientos<br />

ver<strong>da</strong>deros son insignificantes, en comparación con el gran número de sus<br />

creencias equivoca<strong>da</strong>s.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!