Ilegitimidad <strong>de</strong>mocrática y viol<strong>en</strong>cia 1955-1976 LA ALTERNANCIA DE LOS GOBIERNOS CIVILES Y MILITARES. EL PARTIDO MILITAR Y EL PERONISMO. CAPÍTULO LA INFLUENCIA DE LAS DOCTRINAS EXTRANJERAS SOBRE LAS FUERZAS ARMADAS 6 JOSÉ PABLO FEINMANN FILÓSOFO / PERIODISTA / ESCRITOR Habrá que empezar señalando <strong>de</strong> un modo claro, contund<strong>en</strong>te, una cuestión que no se ti<strong>en</strong>e bi<strong>en</strong> analizada, que se la oscurece con <strong>de</strong>liberada frecu<strong>en</strong>cia. En suma, que se quiere ocultar, no reconocer. Des<strong>de</strong> 1955 hasta 1973 –cuando Cámpora asume <strong>de</strong>mocráticam<strong>en</strong>te el gobierno <strong>de</strong> la República con una mayoría <strong>de</strong> votos que llega casi al 50%, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la firma <strong>de</strong>l <strong>de</strong>creto 4.161 <strong>en</strong> que Aramburu prohíbe nombrar a Perón, nombrar a Evita, al Partido Justicialista y lo excluye <strong>de</strong> la política, <strong>de</strong> la participación d<strong>en</strong>tro <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia– la República Arg<strong>en</strong>tina atraviesa una etapa <strong>de</strong> profunda ilegalidad constitucional. De modo que habría que modificar algunas expresiones que nos hemos acostumbrado a utilizar. Por ejemplo, Andrew Graham Yoll dice <strong>en</strong> uno <strong>de</strong> sus libros que el movimi<strong>en</strong>to sedicioso que <strong>en</strong>carnaba Juan Carlos Onganía <strong>de</strong>rroca al gobierno constitucional <strong>de</strong> Arturo Illia. No es así. El gobierno <strong>de</strong> Arturo Illia no era constitucional y lo increíble es que su<strong>en</strong>e raro. Que nos hayamos acostumbrado a que sí, a que lo era y a que el doctor Illia era un <strong>de</strong>mócrata ejemplar. Cuando <strong>en</strong> la película La República Perdida, que se proyecta durante la campaña electoral <strong>de</strong>l radicalismo, durante el año 1983, se lo pres<strong>en</strong>ta como un baluarte, un ejemplo <strong>de</strong> la <strong>de</strong>mocracia, que recibe <strong>en</strong> su <strong>de</strong>spacho al g<strong>en</strong>eral Julio Alsogaray y le dice <strong>de</strong> un modo casi heroico “Usted es un bandolero que se alza contra las autorida<strong>de</strong>s constituidas, etc.”, la g<strong>en</strong>te aplaudía <strong>en</strong> el cine. Yo creo que Julio Alsogaray <strong>de</strong>be haber p<strong>en</strong>sado: “Este hombre se la creyó, se creyó que él es la autoridad constituida, pero <strong>en</strong> realidad nosotros lo pusimos ahí”. Es absurdo lo que dice Illia. A Illia lo habían puesto las Fuerzas Armadas como una máscara <strong>de</strong>mocrática más para disfrazar al país <strong>de</strong> país <strong>de</strong>mocrático. Cuando <strong>en</strong> realidad no lo era <strong>en</strong> absoluto, porque las mayorías no podían votar y el lí<strong>de</strong>r <strong>de</strong> esas mayorías no podía regresar al país y la mujer que esas mayorías habían v<strong>en</strong>erado estaba escamoteada, su cuerpo estaba <strong>de</strong>saparecido, porque, como bi<strong>en</strong> habían calculado los militares aramburistas, don<strong>de</strong> estuviera <strong>en</strong>terrado el cadáver <strong>de</strong> Eva Perón iba a haber un foco <strong>de</strong> conc<strong>en</strong>tración rebel<strong>de</strong>. ¿Por qué? Porque el pueblo humil<strong>de</strong> –al que Evita había favorecido cálidam<strong>en</strong>te– la seguía amando y no quería que se vejara su cuerpo. ¿Por qué son todos gobiernos ilegales? El gobierno <strong>de</strong> la llamada Revolución Libertadora era profundam<strong>en</strong>te ilegal porque surge <strong>de</strong> un golpe contra un gobierno constitucional, contra el gobierno <strong>de</strong> Juan Domingo Perón. Este gobierno <strong>de</strong> Aramburu se propone <strong>de</strong>speronizar al país y conce<strong>de</strong> elecciones <strong>en</strong> las que apuesta por Balbín pero gana Frondizi. De todos modos, ya esas elecciones establec<strong>en</strong> un método que algunos jóv<strong>en</strong>es <strong>de</strong> hoy, lo juro, casi no pued<strong>en</strong> <strong>en</strong>t<strong>en</strong><strong>de</strong>r. Cuando uno le dice a un jov<strong>en</strong> <strong>de</strong> hoy, “Mirá, <strong>en</strong> este país pasó esto, un señor que se llamaba Andrés Framini ganó <strong>de</strong>mocráticam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la provincia <strong>de</strong> Bu<strong>en</strong>os Aires y cuando fue a ocupar su puesto las Fuerzas Armadas lo echaron a patadas y al presid<strong>en</strong>te que había otorgado esa elección lo <strong>de</strong>rrocaron, lo mandaron a Martín García y pusieron a un señor mínimo, José María Guido, para cubrir la fachada <strong>de</strong>mocrática”, 271
272 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGENTINA. EL ROL DE LAS FUERZAS ARMADAS el jov<strong>en</strong> <strong>de</strong> hoy (los jóv<strong>en</strong>es ignoran nuestra historia, la <strong>de</strong>sconoc<strong>en</strong>) cree que le están haci<strong>en</strong>do una broma, contando un cu<strong>en</strong>to absurdo, <strong>de</strong>m<strong>en</strong>cial. La Arg<strong>en</strong>tina no se pue<strong>de</strong> constituir legalm<strong>en</strong>te porque insiste <strong>en</strong> la marginación <strong>de</strong> la fuerza mayoritaria <strong>de</strong>l país y <strong>de</strong>l lí<strong>de</strong>r <strong>de</strong> esa fuerza. Todo eso pot<strong>en</strong>cia a ese lí<strong>de</strong>r, porque lo transforma <strong>en</strong> un objeto maldito. El pueblo está esperando que regrese <strong>en</strong> un avión negro. No hay nada más maldito que lo negro, lo negro es lo prohibido, aquello que se niega. Es como una actitud neurótica, cada uno <strong>de</strong> nosotros vive negando cosas <strong>en</strong> sí mismo hasta que estallan como síntoma. Bu<strong>en</strong>o, el peronismo estalla como síntoma, lo tapan acá, lo tapan allá, lo sofocan, lo sil<strong>en</strong>cian, lo persigu<strong>en</strong>, etc. El primer síntoma grave <strong>de</strong> ese sistema <strong>en</strong>fermo que había establecido el Estado gorila es el secuestro y la muerte <strong>de</strong> Aramburu. P<strong>en</strong>sándolo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la amplia perspectiva histórica que t<strong>en</strong>emos ahora, <strong>de</strong>beríamos <strong>de</strong>cir que ese juego manejado por las Fuerzas Armadas <strong>en</strong>tre gobiernos militares, gobiernos civiles manejados por militares, gobiernos civiles que terminan por hacer lo que no quier<strong>en</strong> los militares y son <strong>de</strong>rrocados (por los militares) y se pon<strong>en</strong> ellos, y pon<strong>en</strong> a otro gobierno civil que tampoco hace lo que quier<strong>en</strong> y lo sacan y se vuelv<strong>en</strong> a poner ellos es un ciclo <strong>de</strong> lam<strong>en</strong>table sustancia <strong>de</strong>mocrática. De 1955 a 1973 no hubo <strong>de</strong>mocracia <strong>en</strong> la Arg<strong>en</strong>tina. Hubo ilegalidad, sofocami<strong>en</strong>to, hubo falta <strong>de</strong> libertad. Lo que yo y muchos le po<strong>de</strong>mos reprochar a esa bu<strong>en</strong>a persona que fue Arturo Illia es que él, <strong>en</strong> lugar <strong>de</strong> irse legalizando a lo largo <strong>de</strong> su breve gobierno, <strong>de</strong>bió no aceptar una <strong>de</strong>mocracia excluy<strong>en</strong>te. Debió <strong>de</strong>cir: “Señores, yo no quiero lavarle la cara a nadie. Si uste<strong>de</strong>s quier<strong>en</strong> elecciones, que las elecciones sean para todos. Si ahí yo gano, mi gobierno será <strong>de</strong>mocrático. De lo contrario, sólo es la careta <strong>de</strong> una situación <strong>de</strong> ilegalidad institucional”. Pero Illia acepta y –como parece ser una persona honesta– los militares sospechan que dará elecciones libres, para todos, sin proscripciones. Lo echan porque es un golpe prev<strong>en</strong>tivo. Lo echan porque es muy posible que dé elecciones ampliadas con el peronismo. Entonces vi<strong>en</strong>e eso <strong>de</strong> la tortuga, <strong>de</strong> las palomas que le dibujan <strong>en</strong> la cabeza. Illia es un tipo l<strong>en</strong>to, torpe, y el país necesita un macho. Arg<strong>en</strong>tina es un país <strong>de</strong> machos, y los militares eran concebidos como los gran<strong>de</strong>s machos <strong>de</strong>l país. Y asume <strong>en</strong>tonces Onganía. Pero Illia, <strong>de</strong> haber sido un auténtico <strong>de</strong>mócrata, cuando le propusieron pres<strong>en</strong>tarse a elecciones <strong>de</strong>bió haber dicho “No señores, yo no me pres<strong>en</strong>to. Me pres<strong>en</strong>to si se pres<strong>en</strong>ta el peronismo; pero hacerles <strong>de</strong> careta <strong>de</strong>mocrática a uste<strong>de</strong>s, lo si<strong>en</strong>to mucho. Soy un hombre <strong>de</strong>mocrático y no me presto a esto”. Ésa era la gran muestra <strong>de</strong> un espíritu auténticam<strong>en</strong>te <strong>de</strong>mocrático, pero sin embargo acepta pres<strong>en</strong>tarse y servir <strong>de</strong> careta <strong>de</strong>mocrática para seguir fr<strong>en</strong>ando al peronismo. Entre tanto, para introducir un tema <strong>de</strong>l que no hemos hablado, hay que hablar <strong>de</strong> la contrainsurg<strong>en</strong>cia. La contrainsurg<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong> efecto ya se ha dicho aquí, llega a la Arg<strong>en</strong>tina ya con Aramburu. No con Aramburu <strong>en</strong> el gobierno, sino con Aramburu como figura principal <strong>de</strong> las Fuerzas Armadas. La figura <strong>de</strong> Alci<strong>de</strong>s López Aufranc es po<strong>de</strong>rosa, y llegan los instructores franceses. Para <strong>de</strong>cirlo <strong>de</strong> un modo brutal, que sacuda, lo que habían <strong>de</strong>scubierto los franceses <strong>en</strong> Indochina y <strong>en</strong> Vietnam –lugares <strong>en</strong> los que habían perdido, pero <strong>en</strong> el fondo ellos estaban seguros <strong>de</strong> que ésa era la táctica– es la tortura. La doctrina francesa se basa <strong>en</strong> la tortura. ¿Por qué? Porque para <strong>de</strong>rrotar a la contrainsurg<strong>en</strong>cia hay que poseer una muy bu<strong>en</strong>a y precisa información. Y la información, según el g<strong>en</strong>eral Paul Aussaresses o Roger Trinquier u otros militares fundam<strong>en</strong>tales <strong>en</strong> la doctrina francesa, se obti<strong>en</strong>e con la tortura. La tortura garantizaba la palabra <strong>de</strong>l torturado, que ponía <strong>en</strong> conocimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> los torturadores lo que necesitaban saber. A esta tarea, <strong>de</strong> un modo irónico o trágico, se la llama “tarea <strong>de</strong> intelig<strong>en</strong>cia”. Es <strong>de</strong>cir, la tarea <strong>de</strong> intelig<strong>en</strong>cia consiste <strong>en</strong> torturar. Hay una película norteamericana (admiro mucho a Estados Unidos y su cine por la capacidad autocrítica que ti<strong>en</strong>e) <strong>en</strong> la que un personaje que ve torturas <strong>en</strong> Iraq llega a Estados Unidos, y le dice a una ag<strong>en</strong>te <strong>de</strong> la CIA “He visto torturas <strong>en</strong> Iraq y yo no lo pu<strong>de</strong> tolerar”. “Mom<strong>en</strong>to”, le dice la ag<strong>en</strong>te, “Estados Unidos no tortura, obti<strong>en</strong>e información, eso que que<strong>de</strong> claro”. Entonces, la contrainsurg<strong>en</strong>cia ya se está preparando <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los tiempos <strong>de</strong> Aramburu, y efectivam<strong>en</strong>te provi<strong>en</strong>e <strong>de</strong> los instructores franceses. Aussaresses, por ejemplo. ¿Quién había sido Paul Aussaresses? Había sido un heroico luchador contra el nazismo. Como vemos, la lucha antinazi queda sólo <strong>en</strong> el mapa. Luego v<strong>en</strong>ía la lucha contra el verda<strong>de</strong>ro <strong>en</strong>emigo, el comunismo. Para los franceses, la lucha <strong>en</strong> Argelia no era una lucha colonialista, era la lucha contra la insurrección marxista como cualquier otra lucha que se ti<strong>en</strong>e. Los ejércitos t<strong>en</strong>ían que interv<strong>en</strong>ir <strong>en</strong> la seguridad nacional para luchar contra el <strong>en</strong>emigo interno marxista. En el plano internacional, <strong>en</strong> la Guerra Fría, eran los dos bloques los que se ocupaban <strong>de</strong> mant<strong>en</strong>erse <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tados pero no beligerantes. Las guerras se daban <strong>en</strong> el Tercer Mundo, <strong>en</strong> Vietnam por ejemplo. En Vietnam también se aplica la doctrina francesa con el Plan Fénix, que g<strong>en</strong>era una cantidad <strong>de</strong> muertos, ses<strong>en</strong>ta mil, och<strong>en</strong>ta mil…, pero que sigue la doctrina francesa no sólo <strong>de</strong> matar al culpable, sino <strong>de</strong> matar a todo el círculo que lo ro<strong>de</strong>a. Los boinas ver<strong>de</strong>s respond<strong>en</strong> con <strong>en</strong>orme crueldad a cada uno <strong>de</strong> los suyos que ca<strong>en</strong>. Por cada uno <strong>de</strong> los suyos que ca<strong>en</strong>, ellos matan 500. Por lo que vemos que esta relación <strong>en</strong>tre 5 y 1, que es tan trágica, se da <strong>de</strong> distintas maneras. Porque el 5 y 1 <strong>de</strong> acá terminó si<strong>en</strong>do el 50 por 1 <strong>de</strong> las fuerzas <strong>de</strong>l golpe <strong>de</strong> 1976. CAPÍTULO 6 / 1955-1976 LA ALTERNANCIA DE LOS GOBIERNOS CIVILES Y MILITARES. EL PARTIDO MILITAR Y EL PERONISMO. LA INFLUENCIA DE LAS DOCTRINAS EXTRANJERAS SOBRE LAS FUERZAS ARMADAS JOSÉ PABLO FEINMANN - Ilegitimidad <strong>de</strong>mocrática y viol<strong>en</strong>cia Pero ¿qué pasaba con la insurg<strong>en</strong>cia? Creo que ésta es la parte más discutible, la que más me va a costar, la que más crítica pue<strong>de</strong> recibir, pero hay que introducirla. En su Historia <strong>de</strong>l siglo XX, Eric Hobsbawm –porque uno siempre se apoya <strong>en</strong> esta g<strong>en</strong>te– califica a los movimi<strong>en</strong>tos guerrilleros latinoamericanos <strong>de</strong> la década <strong>de</strong>l ses<strong>en</strong>ta a partir <strong>de</strong> que han obt<strong>en</strong>ido un fracaso espectacular, lo pone <strong>en</strong> mayúsculas, y muy simplem<strong>en</strong>te explica los motivos. Primer motivo: exageración <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r contra el cual luchó la Revolución Cubana. La Revolución Cubana no fue el suceso <strong>de</strong> doce guerreros que luego fueron sumando fuerzas y <strong>de</strong>rrocaron a un régim<strong>en</strong> po<strong>de</strong>roso. El régim<strong>en</strong> no era po<strong>de</strong>roso. El Ejército <strong>de</strong> Batista estaba corrupto, <strong>de</strong>sal<strong>en</strong>tado, Batista llevaba ya mucho tiempo <strong>en</strong> el po<strong>de</strong>r, Estados Unidos no lo respaldaba y veía con simpatía a estos barbudos rebel<strong>de</strong>s que v<strong>en</strong>ían a quitarles <strong>de</strong> <strong>en</strong>cima a un régim<strong>en</strong> realm<strong>en</strong>te incómodo como era el <strong>de</strong> Batista, porque era sanguinario, impres<strong>en</strong>table. A<strong>de</strong>más, Castro maneja al campesinado, es <strong>de</strong>cir, no se trata <strong>de</strong> una guerrilla foquista. Castro respon<strong>de</strong> al campesinado, a los sectores sindicales, y se <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>ta a un ejército muy <strong>de</strong>bilitado. Segunda, trem<strong>en</strong>da, incompr<strong>en</strong>sión: Ernesto “Che” Guevara publica un panfleto, un texto muy importante que se llama “Cuba: Vanguardia <strong>en</strong> la lucha revolucionaria o excepcionalidad histórica”. Guevara se echa furibundam<strong>en</strong>te contra aquellos a qui<strong>en</strong>es llama excepcionalistas, <strong>en</strong>tre los cuales me t<strong>en</strong>dría que ubicar yo. Porque esta tesis que estoy dando es la <strong>de</strong>l excepcionalismo <strong>de</strong> la Revolución Cubana. La revolución <strong>en</strong> Cuba fue excepcional porque Estados Unidos no la veía como una revolución marxista, porque el gobierno <strong>de</strong> Batista se caía y el Ejército no era una fuerza po<strong>de</strong>rosa. Eso se lo dijo Valle al “Che” Guevara <strong>en</strong> 1961. Valle le dijo: “Cuidado con la Arg<strong>en</strong>tina, la Arg<strong>en</strong>tina no es la Cuba <strong>de</strong> Batista, la Arg<strong>en</strong>tina ti<strong>en</strong>e fuerzas po<strong>de</strong>rosas <strong>de</strong> represión”. Y Ernesto Guevara le contestó: “Son todos merc<strong>en</strong>arios”. Esto no fue una respuesta correcta, porque un merc<strong>en</strong>ario es muy peligroso, un merc<strong>en</strong>ario es un guerrero muy bi<strong>en</strong> <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ado y es m<strong>en</strong>tira que no t<strong>en</strong>ga los i<strong>de</strong>ales <strong>de</strong> un jov<strong>en</strong> i<strong>de</strong>alista revolucionario, porque ti<strong>en</strong>e una i<strong>de</strong>ología que se le ha metido al merc<strong>en</strong>ario: “Usted está luchando por la libertad <strong>de</strong> este contin<strong>en</strong>te, usted está luchando contra el po<strong>de</strong>r comunista que int<strong>en</strong>ta <strong>de</strong>vorar al mundo, usted está luchando por la religión <strong>de</strong> sus padres”, miles <strong>de</strong> causas se le pued<strong>en</strong> inocular a un merc<strong>en</strong>ario. Y <strong>en</strong> última instancia un merc<strong>en</strong>ario es un sádico y su tarea es la guerra, y es un muy eficaz guerrero. Entonces cuando el “Che” dice “son todos merc<strong>en</strong>arios” comete un error. Los merc<strong>en</strong>arios son muy po<strong>de</strong>rosos. Entonces ¿qué t<strong>en</strong>emos acá? T<strong>en</strong>emos una revolución que es aceptada <strong>en</strong> una situación excepcional por Estados Unidos; un personaje carismático que fue Ernesto Guevara, que crea una teoría aj<strong>en</strong>a al marxismo. La crea junto con Régis Debray, y Hobsbawm abre paréntesis y pone “el francesito <strong>de</strong> turno” (como bu<strong>en</strong> inglés, Hobsbawm hace un chiste: no podía faltar ahí un francés). El francesito escribe Revolución <strong>en</strong> la Revolución, don<strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrolla la teoría <strong>de</strong>l foco. La teoría <strong>de</strong>l foco no ti<strong>en</strong>e nada que ver con el marxismo. Marx y Engels están <strong>en</strong> contra <strong>de</strong>l terrorismo. Si uno lee (y yo las he leído) sobre todo las obras <strong>de</strong> Marx advierte que siempre une la lucha revolucionaria con las masas. No hay lucha revolucionaria si las masas, el pueblo, no acompañan. Debray y Guevara crean la teoría <strong>de</strong>l foco, que consiste <strong>en</strong> esto: el movimi<strong>en</strong>to guerrillero <strong>de</strong>be c<strong>en</strong>trar un foco revolucionario <strong>de</strong> 8, 10, 15 personas que comi<strong>en</strong>zan a actuar, y ese foco ti<strong>en</strong>e un po<strong>de</strong>r gradualizador que va atray<strong>en</strong>do cada vez más a las masas, logrando cada vez más po<strong>de</strong>río hasta que se realiza el asalto final. Es <strong>de</strong>cir, no se parte <strong>de</strong> las masas, sino que se parte <strong>de</strong> la elite. En suma, es una teoría <strong>de</strong> vanguardia. ¿Cuál es el problema <strong>de</strong> la vanguardia? Que la vanguardia actúa <strong>de</strong>s<strong>de</strong> afuera, la vanguardia cree conocer las leyes <strong>de</strong> la Historia. L<strong>en</strong>in <strong>de</strong>cía “La vanguardia conoce las leyes <strong>de</strong> la Historia”, y Rosa <strong>de</strong> Luxemburgo le <strong>de</strong>cía que nadie pue<strong>de</strong> conocer las leyes <strong>de</strong> la Historia. Pero el Partido Comunista <strong>en</strong> la URSS se legitima porque conoce las leyes <strong>de</strong> la Historia y las pue<strong>de</strong> bajar a las masas. La vanguardia siempre va a <strong>de</strong>cir “Nosotros sabemos más que las masas, porque conocemos las leyes <strong>de</strong> la Historia”. Ocurre algo muy simple, la historia no ti<strong>en</strong>e leyes, nadie sabe adón<strong>de</strong> va la historia. Esto lo hemos advertido <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace tiempo, pero hay muchos que insistieron <strong>en</strong> que la historia t<strong>en</strong>ía leyes, y <strong>en</strong> que el mundo marchaba al socialismo. Como dice Walter B<strong>en</strong>jamin, <strong>en</strong> Tesis <strong>de</strong> la Filosofía <strong>de</strong> la Historia, nada causó más daño a la clase obrera alemana que creer que nadaba a favor <strong>de</strong> la corri<strong>en</strong>te. Nunca se nada a favor <strong>de</strong> la corri<strong>en</strong>te, porque no hay una corri<strong>en</strong>te. La corri<strong>en</strong>te hay que crearla, <strong>en</strong>tonces hay que crearla con el pueblo y hay que trabajar con el pueblo. Esto es lo que surge <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una lectura at<strong>en</strong>ta <strong>de</strong> los textos <strong>de</strong> Karl Marx. Entonces t<strong>en</strong>emos una situación histórica que constituye una trampa formidable. La Revolución Cubana que aprovecha una situación excepcional, teoría <strong>de</strong>l foco que se da <strong>en</strong> gran medida, como dice Hobsbawm, por el carácter errático <strong>de</strong> Ernesto Guevara, el Congo, Praga, Bolivia… Y surg<strong>en</strong> así los movimi<strong>en</strong>tos <strong>de</strong> la guerrilla latinoamericana, uno <strong>de</strong> cuyos mayores problemas es no preguntarse jamás ¿cuál es la fuerza <strong>de</strong>l <strong>en</strong>emigo, contra quién peleamos? Ignoraban por completo todo esto <strong>de</strong> la doctrina francesa. Sabían algo <strong>de</strong> la Escuela <strong>de</strong> las Américas, pero ignoraban que el Ejército, como <strong>de</strong>cía un compañero mío <strong>en</strong> los set<strong>en</strong>ta, todavía no se había puesto <strong>en</strong> serio con la guerrilla. 273
- Page 2 and 3:
AUTORIDADES NACIONALES DRA. CRISTIN
- Page 4 and 5:
AUTORES MORENO, OSCAR COORDINADOR A
- Page 6 and 7:
189 ANA VIRGINIA PERSELLO ¿Qué re
- Page 8 and 9:
14 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 10 and 11:
NACIÓN Y FUERZAS ARMADAS: NOTAS PA
- Page 12 and 13:
NACIÓN Y FUERZAS ARMADAS: NOTAS PA
- Page 14 and 15:
NACIÓN Y FUERZAS ARMADAS: NOTAS PA
- Page 16 and 17:
NACIÓN Y FUERZAS ARMADAS: NOTAS PA
- Page 18 and 19:
Roux, Guillermo. San Martín Guerre
- Page 20 and 21:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 22 and 23:
42 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 24 and 25:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 26 and 27:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 28 and 29:
54 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 30 and 31:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 32 and 33:
62 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 34 and 35:
66 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 36 and 37:
70 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 38 and 39:
74 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 40 and 41:
Una estrategia para el Río de la P
- Page 42 and 43:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 44 and 45:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 46 and 47:
90 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN A
- Page 48 and 49:
Milicias, Ejército y construcción
- Page 50 and 51:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 52 and 53:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 54 and 55:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 56 and 57:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 58 and 59:
114 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 60 and 61:
118 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 62 and 63:
122 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 64 and 65:
126 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 66 and 67:
130 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 68 and 69:
El Ejército entre el cambio de sig
- Page 70 and 71:
138 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 72 and 73:
142 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 74 and 75:
LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 76 and 77:
150 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 78 and 79:
Vida política y electoral (1880-19
- Page 80 and 81:
158 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 82 and 83:
162 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 84 and 85:
Vuchon, A. S/título, 1933. Óleo,
- Page 86 and 87: 170 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 88 and 89: 174 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 90 and 91: 178 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 92 and 93: 182 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 94 and 95: 186 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 96 and 97: 190 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 98 and 99: 194 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 100 and 101: 1930-1943 LA CRISIS DEL MODELO AGRO
- Page 102 and 103: 202 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 104 and 105: Quinquela Martín, Benito. Desembar
- Page 106 and 107: 210 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 108 and 109: Defensa Nacional y Fuerzas Armadas.
- Page 110 and 111: 218 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 112 and 113: Hacia 1955: la crisis del peronismo
- Page 114 and 115: 226 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 116 and 117: 230 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 118 and 119: LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN ARGE
- Page 120 and 121: 238 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 122 and 123: Malanca, José. S/título, 1951. Ó
- Page 124 and 125: 246 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 126 and 127: 250 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 128 and 129: 254 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 130 and 131: 258 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 132 and 133: Vivencias “En lo altooo la miraaa
- Page 134 and 135: 266 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 138 and 139: 274 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 140 and 141: Presas, Leopoldo. Fondo del mar, 19
- Page 142 and 143: 282 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 144 and 145: 286 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 146 and 147: 290 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 148 and 149: 294 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 150 and 151: 298 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 152 and 153: 302 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 154 and 155: 306 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 156 and 157: 310 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 158 and 159: 314 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN
- Page 160 and 161: 318 LA CONSTRUCCIÓN DE LA NACIÓN