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98 PARTE I FOTOGRAFÍA DE UNA SOCIEDAD EN MOVIMIENTO<br />
Como consecuencia de todo ello, puede haber una mayor exposición a conductas de riesgo, ya sea a las<br />
adicciones clásicas o a las nuevas tecnologías.<br />
“A algunos les llaman ‘jóvenes de la llave’. Ya algunos, desde muy corta edad, no tienen en casa ningún<br />
tipo de control ni de orientación, porque sus padres están ocupados y tienen que cumplir con una<br />
responsabilidad. Pero desde tan temprana edad darle una llave a un joven, y que sepan, de acuerdo a la<br />
ley, que un joven no puede andar con este tipo de cosas… Y además son jóvenes que desarrollan una<br />
adicción a las nuevas tecnologías porque están sin ningún tipo de control. Es un riesgo también”.<br />
El efecto de la creciente falta de oportunidades genera en muchos jóvenes un cambio de horizonte,<br />
especialmente en quienes se han formado. En lugar de apostar por quedarse en España, empiezan a plantearse<br />
regresar a sus países de origen o al de sus padres. En el caso de Marruecos, se observa que regresan jóvenes<br />
cualificados (algunos nacidos en España) que encuentran en el país de origen las oportunidades laborales<br />
que no encuentran aquí. Todo ello implica un nuevo rumbo de migración a los países de origen de sus padres,<br />
algo que hasta ahora no estaba contemplado. Una nueva ruta de vida que trae muchos retos de integración<br />
en el nuevo contexto y que, también allí, requiere una atención especial.<br />
“Antes había grupos que vinieron solo a estudiar o solo a trabajar, ahora casi todos vienen a trabajar. El<br />
futuro es casi incierto en el caso de España, ya con terceras generaciones”.<br />
“En los últimos años los graduados inmigrantes están viendo más oportunidades de regresarse que de<br />
quedarse aquí. Por ejemplo, el que puedas quedarte ya no es lo mejor que puedes elegir, y entonces, por<br />
ejemplo, se creó un grupo de graduados que se encuentran en diferentes países de Europa, para que<br />
desde Marruecos puedan ser contactados y regresar al país a trabajar”.<br />
“Existe una bolsa de empleo en Europa de estudiantes marroquíes y, si te apuntas a esa bolsa, tienes más<br />
oportunidades de trabajar si eres ingeniero o doctorado en cualquier especialidad. Yo creo que hay más<br />
tendencia de volver al país que de regresar, incluso en los que ya han nacido aquí, porque es el país de<br />
sus padres el que les ofrece una oportunidad. Y tienen que hacer un proceso de integración en la nueva<br />
sociedad porque hay muchas cosas que no conocen”.<br />
Quienes gozan de menos suerte porque aún no han finalizado sus estudios, encuentran mucha dificultad en<br />
vislumbrar un horizonte exitoso. Como se comentó también en el grupo anterior, los expertos señalan que<br />
muchos jóvenes se debaten entre la formación no alcanzada en España y la falta de oportunidades que sufrirán<br />
en sus propios países de origen –o los de sus padres- en caso de que se planteen esta alternativa. Ello se<br />
acusa especialmente en jóvenes de América Latina –de países que han avanzado mucho en los últimos años,<br />
como Ecuador- y de África Subsahariana. Perciben un desfase de formación respecto a los jóvenes que viven<br />
allá y una falta de horizonte de incorporación inmediata al mundo laboral, tanto allí como aquí.<br />
“Los inmigrantes que llevan mucho tiempo aquí, por ejemplo de Ecuador, que no tuvieron oportunidad de<br />
seguir formándose, homologar y trabajar. Ahora ni pueden progresar aquí ni pueden irse de vuelta, porque<br />
Ecuador ha progresado y ellos ya están atrasados. Hasta para Ecuador es un tema…”.<br />
“En otra reunión con africanos salió el tema y dijeron: ‘quieren que nos vayamos a nuestro país, dennos<br />
una formación que nos den títulos que haga que ahí progresemos…‘. ‘Nosotros tenemos que volver con<br />
título o con dinero’”.