11.10.2013 Views

Libre - Fundación César Manrique

Libre - Fundación César Manrique

Libre - Fundación César Manrique

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Mientras en los primeros años de la fase expansiva, existía un cierto equilibrio entre ambos<br />

tipos de revalorizaciones, en 1999 y, sobre todo en 2000, el desplome en las cotizaciones va a<br />

provocar un mayor protagonismo comparativo de los precios inmobiliarios en el enriquecimiento<br />

neto de aquellos hogares propietarios de inmuebles.Ambas tendencias han llevado a un<br />

resultado que ya se apuntó en la citada publicación, es decir, que la fracción del patrimonio de<br />

los hogares dependiente de la Bolsa y del mercado de la vivienda era a finales de la década de<br />

los noventa superior al 80 por 100.<br />

Aunque, tradicionalmente, las familias han financiado sus aumentos de consumo con el incremento<br />

de sus flujos ordinarios de renta y ahorro; en los últimos quince años, el proceso descrito<br />

ha permitido expandir la adquisición de bienes y servicios de los hogares por encima de las<br />

posibilidades ofrecídas por el crecimiento de su renta o ahorro, en un fenómeno conocido como<br />

«efecto riqueza». Sin embargo, no sólo se trata de que el consumo aumente a mayor ritmo que<br />

las variables mencionadas, sino que, también, en ocasiones, se produce un resultado aparentemente<br />

incomprensible para el enfoque convencional, a saber: la simultaneidad entre la disminución de las<br />

tasas de ahorro y el progresivo enriquecimiento de los hogares. Los datos proporcionados por la Contabilidad<br />

Nacional apenas ayudan a dilucidar este controvertido resultado, ya que ésta, al preocuparse<br />

únicamente de los valores añadidos generados en la compraventa de bienes y servicios,<br />

deja de lado aquellos otros valores obtenidos en la compraventa de elementos patrimoniales (bienes<br />

inmuebles, acciones, ...). Corolario evidente al carecer, hasta hace poco, los Sistemas de Cuentas<br />

Nacionales de la necesaria Contabilidad del Patrimonio que haría posible tal cuantificación 62 .<br />

Pero, a pesar de estas limitaciones, ultimamente han surgido trabajos analíticos con la intención<br />

de clarificar el panorama en relación con el «efecto riqueza» en España, que se han hecho<br />

eco de investigaciones disponibles ya para otros países 63 . De estos estudios se desprende que un<br />

incremento de las revalorizaciones patrimoniales de un euro, se salda con un aumento adicional<br />

del consumo de entre uno y tres céntimos. En el Gráfico 8.7. se muestran los resultados de un<br />

trabajo reciente en el que se ha supuesto una media de dos céntimos, suficiente para explicar casi<br />

dos puntos porcentuales del incremento del consumo de los hogares en los años finales del ciclo<br />

expansivo, lo que supone entre el 23 y el 28 por 100 de la variación total en el consumo de las<br />

familias durante esos años 64 . En términos absolutos esta cantidad suponía en 1999 un gasto adicional<br />

de 1 billón de pesetas, mientras que en 2000 dicha cantidad alcanzó los 1,2 billones.<br />

Para lograr esas ganancias en el consumo a partir de las revalorizaciones patrimoniales, los<br />

hogares han tenido previamente que modificar la estructura de su propio patrimonio, sobre todo<br />

financiero. Frente al predominio de los depósitos bancarios como forma tradicional de mantener<br />

el ahorro durante la década de los ochenta, en los años noventa hemos asistido a una importante<br />

mutación en la cartera inversora de las familias.<br />

521

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!