Benedetti, Mario - Letras del continente mestizo

más sensible al nueve y cambiante rostro de su despiadadoanfitrión.Como imprevista consecuencia, la poesía ha ganadoen claridad. Por supuesto, esto no significa que ahorael verso sea diáfano, transparente. Las palabras son aveces una mención de superficie, una boya de alarmapara que el lector sepa que en el fondo hay rocas, cicatrices,nostalgias. Pero si los sucesos, fechas, lugares,apellidos (datos varios para la curiosidad y otros morbososcomputadores) siguen a veces parapetados detrásde IIU misterio, no es misteriosa en cambio la actitudque los compagina, la mirada que los evoca. El poeta haperdido algo de fervor, de efusión, de ímpetu primario;pero su poesía (particularmente en Aunque dureun instante, Se hace tarde doctor, Morning thoughts,Confesión, Punto de partida, Pequeña patria, Mis adioses)ha ganado en profundidad, en concisión, en rigor;tres formas de decir que ha ganado en verdad.Vía única es un libro de cuentas claras: con las raíces,con el contorno, con el pasado, pero sobre todode cuentas claras con el abismo personal ("Un abismoa mi lado. / N o lo ven los demás"). Quizá la únicavía que propone el título sea la de la verdad sin ripios,sin excusas. Por eso esta instancia de decisiones, de autofranqueza,tiene una fuerza interior que por lo menosno era tan perceptible en los libros que la precedieron.y cuando el poeta asume la responsabilidad de su invención("Hay algo que me acecha: / el pozo, / e~cuarto oscuro. / Se vuelve el agua fría / y malévolo elviento. / Invento una gaviota, / invento lágrimas");cuando, a pesar de las previsibles complicaciones, sedecide por fin a inventar su gaviota, ya es conscientede que en esa operación, en ese ejercicio de sus derechos,está también creando su llanto, concibiendo unamás humana dimensión de su angustia. Después de todo,compensar la inevitablemente espesa desolación real,por la despejada invención de otras lágrimas, puede seruna forma (acaso la única que nos es permitida) dedespistar al dolor, y, con un poco de suerte, de vencerlo.152(1965) .