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Manuel Sánchez Mármol - Universidad Juárez Autónoma de Tabasco

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<strong>Manuel</strong> <strong>Sánchez</strong> <strong>Mármol</strong><br />

dotada <strong>de</strong> buena fe en la promoción <strong>de</strong>l bien <strong>de</strong> su país; pues<br />

si así no fuera, o los que la forman no habrían aspirado a<br />

regir sus <strong>de</strong>stinos, o no hubieran aceptado el mandato <strong>de</strong> sus<br />

conciudadanos. Yo no niego que haya ambiciones bastardas y<br />

<strong>de</strong> mala ley; no niego que haya quienes buscan los altos <strong>de</strong>stinos<br />

para traficar con la fortuna y porvenir <strong>de</strong> sus conciudadanos;<br />

pero mientras esto no esté justificado por una serie <strong>de</strong> actos<br />

administrativos repetidos, a nadie creo con <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> tachar<br />

<strong>de</strong> mala fe a una administración. Sería, pues, villano e innoble<br />

no proce<strong>de</strong>r con ella con la sincera lealtad <strong>de</strong> que es <strong>de</strong><br />

suponérsele animada.<br />

Debe compren<strong>de</strong>rse que en todo lo dicho me refiero a la<br />

situación <strong>de</strong> un país legalmente constituido. No seré yo quien<br />

aconseje mo<strong>de</strong>ración y templanza cuando se trate <strong>de</strong> combatir<br />

a un po<strong>de</strong>r opresor que haya echado hondas raíces en el suelo<br />

<strong>de</strong> un país. La vehemencia, la acrimonia, la moralidad, siquiera<br />

tengan el cadalso por pena, son entonces un <strong>de</strong>ber para el<br />

escritor público o el orador, que tiene que concitar las pasiones<br />

<strong>de</strong> las masas para levantar esos huracanes <strong>de</strong> los pueblos que<br />

se llaman las revoluciones.<br />

Pero ésta es, por fortuna, una situación anómala y<br />

pasajera <strong>de</strong> las oposiciones. Siendo ella las vísceras <strong>de</strong> la opinión<br />

pública, natural, forzoso, in<strong>de</strong>clinable es que se extravasen en<br />

ellas los odios sociales, y en ellas vengan a manifestarse con su<br />

carácter más pronunciado los síntomas <strong>de</strong> la enfermedad.<br />

Las revoluciones no son endémicas ni periódicas <strong>de</strong> la<br />

hu manidad; son cataclismos, que, como la erupción <strong>de</strong> los<br />

volca nes, ningún po<strong>de</strong>r es capaz <strong>de</strong> regular.<br />

Todos los ciudadanos que con su individualidad no integran<br />

una administración, <strong>de</strong>ben ser en el sentido que en este<br />

artículo he procurado explicar, otros tantos peones <strong>de</strong> la oposición.<br />

Que ellos trabajen con fe, animados <strong>de</strong> la esperanza,<br />

último don <strong>de</strong> los <strong>de</strong>sgraciados; que, guiados por la lealtad, se<br />

guar<strong>de</strong>n <strong>de</strong> excitar las malas pasiones y <strong>de</strong> provocar las iras <strong>de</strong> la<br />

susceptible ignorancia; que con aquella mesura, comedimiento<br />

y respeto que es propio <strong>de</strong> las almas dignas, señalen el mal<br />

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