XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

que nos hace tan humanos. ((Y pasa a corregir a Valle
Inclán)). “El movimiento interior del espíritu, (a
Baroja) indócil, inquieto, arisco, exigente, que no se
deja moldear por las impresiones del medio, que
prefiere ser fiel a un individual destino aunque esto
le cueste renunciar al triunfo en la sociedad. Al punto
notamos la nobleza, la dignidad que hay en esa manera
de enfrentarse con la vida. Y frente a materia,
espíritu, quiere decir esfuerzo, ímpetu, dinamicidad,
nos parece haber mayor porción en el vagabundo que en
la normal y adaptada. La adaptación toma el carácter de
caída, de inercia, vil sumisión a la esclavitud. En
diez años escribe Baroja 20 tomos de vagabundaje. En
todo hombre o mujer que encontramos, en todo libro que
leemos sólo nos interesa conocer cuál ser el resultado
de un balance vital. Si no lo ha hecho –como suele
ocurrir- nuestra estimación se retira de ellos. Quien
no se ha puesto a sí mismo en claro frente a cuestiones
últimas, no nos interesa”.
(Sobre un defecto español).
“Es innovación, el gesto creador, ese ademán con que
se suscita algo nuevo sobre el haz del mundo nos parece
incompatible con la dignidad nacional. Tesitura tal
lleva en arte al colmo del absurdo”.
“Sea hospitalaria nuestra inteligencia y enseñémosla
a gozarse cuando en nuestra puerta llama un extraño, un
desconocido, una idea, o emoción con que no
contábamos”.
“Obra sobre nuestro espíritu un terrible poder de
inercia el cual nos induce a contentarnos con el trozo
de vida que nos es habitual, creará la convicción de
que no haya...”.
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