XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

ASCÉTICA
El sentido de nuestra vida y de todos sus latidos
es Dios y no puede ser nada ni nadie más. Todos hemos
de formar una piña y amarnos tanto que alcancemos este
fin feliz para el cual hemos nacido.
El consuelo, la paz ha de estar puesta donde se
encuentra y permanece: en Dios vivo y buen pagador.
”Está seguro de que eres hombre de Dios si llevas con
alegría y silencio la injusticia”, n. 672. Está
”Jesús...callado. Por qué hablas tú, para consolarte o
para sincerarte”. (Camino).
ESCRITURA
“Temo que cuando vaya, Dios me aflija otra vez por
causa vuestra y tenga que ponerme de luto por muchos
que pecaron antes y no se han convertido de la
inmoralidad, libertinaje y desenfreno en que vivían”.
(2 Co 12).
PADRES
“Huye de la intriga y del fraude; más aún, habla a
los fieles para precaverlos contra ello. Recomienda a
mis hermanas que amen al Señor y que vivan contentas
con sus maridos, tanto en cuanto a la carne, como en
cuanto al espíritu”. (Ignacio de Antioquia, Funk 1,
249).
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