XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

HISTORIA
La lucha contra la perversión de la justicia en los
ámbitos del poder y de la jurisprudencia constantemente
atacadas por la malicia y corrupción humanas.
“C. Cornelio se refirió a la oligarquía en
cuanto a su reclutamiento, y presentó en la curia una
moción de “ambitu” que hubiese reprimido eficazmente la
corrupción porque, además de excluir a los corruptores
por diez años de la carrera de los honores, tendía a
implicar en los procesos por corrupción electoral a los
cómplices de los grandes, es decir, a los “divisores”
que procuraban sufragios para sus candidatos
repartiendo los donativos que éstos les confiaban a ese
fin. Decentemente el Senado no podía rechazar esos
principios. Pero le irritaba tener que prescindir de
sus agentes electorales. Decidió pues que los cónsules
se inspirasen en el proyecto de Cornelio, pero
aderezándolo e introduciéndole las correcciones
necesarias a fin de que antes de las elecciones les
quedase ya el voto asegurado. El Senado violaba así, a
su favor, una disposición de la ley Fufia, que prohibía
que durante el período de elecciones se introdujesen
modificaciones en el estatuto electoral. C. Cornelio
replicó con una segunda proposición, destinada
aparentemente a anular el senadoconsulto que los Patres
opusieron a la primera. En su nueva intervención, en
efecto, Cornelio establecía que nadie podía quedar
exento –salvo por mandato del pueblo- del cumplimiento
de las leyes en vigor. Los Patres esquivaron la
adopción de la propuesta, mediante la intervención de
un tribuno previamente sobornado: P. Servilio Glóbulo.
En el momento en que el contio del texto de su colega
iba a ser leído por el funcionario encargado de tal
misión, Glóbulo impuso a éste silencio. Cornelio hizo
ademán de leer el mismo, y el cónsul c. Calpurnio Pisón
protestó vehementemente contra ese atentado a la
soberanía de la intercessio tribunicia. Pero la
multitud le cortó con gritos e injurias la palabra.
Pisón ordenó entonces la detención de los
alborotadores; éstos respondieron arrojando sobre él
una lluvia de piedras y arrebatándoles las armas a sus
lictores. Cornelio, para evitar la efusión de sangre,
retiró su “contio”. A continuación tuvo lugar un
compromiso entre los dos partidos. Pisón a cambio del
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