XVIII Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

HISTORIA
Tesis.-Nosotros a Dios siempre le causamos afán misericordioso (A), tanto que
Él mismo se nos da (B). Fuera de Él, sólo vaciedad (C).
Roma convulsionada, desordenada, rehuye el sumiso
acatamiento a la justicia. Todos contribuyen con su
grado de egoísta veleidad.
La recrudescencia de la piratería (69-68).
“A medida que Lúculo se alejaba del Mediterráneo,
en aquel avance descabellado que lo llevó más allá del
Tigris, a las ásperas soledades del macizo armenio, los
piratas rehacían sus nidos, y sostenidos por Mitrídates
–como lo fueron los berberiscos por el Gran Turco en la
Edad Moderna- aumentaban su flota, que comprendía ya
mil navíos, entre los cuales había trirremes del tipo
más rápido y más lujoso –que habían reemplazado a las
cáscaras de nuez de sus “ratones” (mayoparones)- con
tripulaciones instruidas para navegar en cualquier
estación del año; el radio de sus fechorías comprendía
los mares Egeo y Tirreno. Después de saquear Cnido,
Colofón, Samos, de asolar la isla de Egina, de
destrozar Delos, todavía maltrecha por la última guerra
de Mitrídates, aparecieron en Italia. En Asia pusieron
a precia de rescate a César el año 74, y a Clodio el
68. En Europa, después de haber escoltado a Sertorio y
sostenido a Espartaco, raptaron a los romanos de sus
casas de recreo levantadas en las playas: a Antonia la
hija de su vencedor del año 102, a los pretores
Sextilio y Belieno. Operaron en el cabo Miseno, en
Gaeta; dieron golpes de mano hasta en la Vía Apia. En
fin, llegaron a las puertas de Roma y capturaron toda
una flota fondeada en Ostia. Nadie se atrevía ya a
cruzarse con ellos por temor a caer en sus manos y ser
arrojados, entre sarcasmos, a la mar. El comercio se
había paralizado, y con él el tráfico de víveres. A
comienzos del 67, Roma estaba asumida en la zozobra de
la brusca alza de los precios, aterrada por el espectro
del hambre. En medio de esa atmósfera de febril
ansiedad, Gabinio presentó en la Curia su proposición
revolucionaria”.
“La “rogatio Gabinia”.
“Para terminar de una vez con los males
intolerables de la piratería, Gabinio invitó al Senado
a que eligiese entre los cónsules un promagistrado al
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