La ultima morada. Zona Prohibida.
¡La búsqueda ha terminado! Un grupo de viajeros extraterrestres ha arribado a la Tierra con intenciones desconocidas. Maravillados por la hermosura del planeta deciden descender a investigar; mientras, en el bosque Amazónico, el comandante de operaciones John Waterstone lidera un proyecto secreto del gobierno de los Estados Unidos, pero todo sale mal para las dos partes involucradas... Por otra parte, Miguel ha confirmado el diagnostico de su enfermedad, sin saber que pronto cambiará todo en su vida. ¿Qué les depara el destino a estos seres? ¿Cuáles son sus intenciones? ¿Quienes son y de donde provienen? ¿Cómo y por qué cambiará la vida de Miguel?
¡La búsqueda ha terminado! Un grupo de viajeros extraterrestres ha arribado a la Tierra con intenciones desconocidas. Maravillados por la hermosura del planeta deciden descender a investigar; mientras, en el bosque Amazónico, el comandante de operaciones John Waterstone lidera un proyecto secreto del gobierno de los Estados Unidos, pero todo sale mal para las dos partes involucradas... Por otra parte, Miguel ha confirmado el diagnostico de su enfermedad, sin saber que pronto cambiará todo en su vida. ¿Qué les depara el destino a estos seres? ¿Cuáles son sus intenciones? ¿Quienes son y de donde provienen? ¿Cómo y por qué cambiará la vida de Miguel?
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- Como le dije, señorita, 9 millones es mucha plata. Le ofrezco 5 millones por las 1300<br />
acciones. Seguí su historial en la bolsa y solamente han comprado una vez en ella, ¿cómo<br />
sé que no tenían información privilegiada y así supieron dónde invertir?<br />
- Es imposible que tuviéramos ese tipo de información, fue un salto de fe que hicimos para<br />
recolectar ese dinero, lo necesitamos para tratar una extraña enfermedad que tiene<br />
Miguel, invertimos todos nuestros fondos en esto. Es para llevarlo a Estados Unidos a<br />
recibir un tratamiento experimental en sus ojos – dijo Imh, sin alterarse al lanzar tamaña<br />
mentira, nublando los ojos del muchacho, para hacerle parecer enfermo.<br />
- Es verdad, señor Palacios, puede ver como mis ojos están deteriorados – añadió Miguel,<br />
mostrándole sus ojos recién alterados al incrédulo anciano.<br />
- Si Miguel no recibe tratamiento, dentro de unos años quedara completamente ciego.<br />
Puedo bajar el precio a 7 millones y medio – dijo Imh, bajando el precio de las acciones.<br />
- Es una pena que el joven este enfermo, pero aun así el valor es muy alto, te ofrezco 5<br />
millones y medio, y siento que me estoy arriesgando con ese precio – dispendió Palacios.<br />
- 7 millones – replicó Imh, bajando nuevamente el precio.<br />
- 6 millones, y no puedo ofrecer más – contestó el viejo ante la última oferta.<br />
- 6 millones y medio, por 1301 acciones, ¡última oferta! – exclamó Imh, intentando sacar un<br />
poco más de dinero del anciano.<br />
- Mmmm… ¿Quieres quedarte sólo con 25 acciones? – preguntó Palacios, intentando<br />
desconcentrar a Imh del tema central.<br />
- Sí, y es mi última oferta, no puedo bajar más el precio. Sería una perdida – dijo Imh,<br />
intentando convencer a Palacios.<br />
- Ya, 6 millones y medio por 1310 acciones – dijo Palacios, intentando embaucar a la<br />
muchacha, extendiendo su mano para que la estrechara.<br />
- 1301 acciones, ¿está claro? – dijo Imh, mirando con cara de enojo a Palacios por el intento<br />
de fraude recién efectuado.<br />
- 6 millones y medio por 1301 acciones. Casi caíste – dijo Palacios, con voz burlona,<br />
mientras extendía nuevamente su mano para que Imh la estrechara.<br />
- Tenemos un trato – respondió Imh, estrechando la mano del truculento anciano.<br />
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