14.05.2013 Views

Alejandro Dumas - La dama de Monsoreau - v1.0.

Alejandro Dumas - La dama de Monsoreau - v1.0.

Alejandro Dumas - La dama de Monsoreau - v1.0.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

-¡Hola! -repuso el gascón-, ¿no te has<br />

muerto?<br />

-Mi buen señor Chicot -continuó el fraile<br />

haciendo un esfuerzo sobre su enorme vientre-;<br />

¿es posible que queráis entregarme a<br />

mis perseguidores, a mí, a vuestro Gorenflot?<br />

-¡Canalla! -exclamó Chicot con acento <strong>de</strong><br />

ternura mal disimulado.<br />

Gorenflot se echó a llorar; y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong><br />

haber logrado cruzar las manos, procuró retorcerse<br />

los brazos.<br />

-Yo -<strong>de</strong>cía-, yo que os he acompañado<br />

tantas veces <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> una buena mesa, yo<br />

que con tanta gracia bebía según vos, que<br />

me llamábais siempre el rey <strong>de</strong> las esponjas;<br />

yo, tan aficionado a las gallinas que hacíais<br />

a<strong>de</strong>rezar en el Cuerno <strong>de</strong> la Abundancia, que<br />

no <strong>de</strong>jaba <strong>de</strong> ellas ni los huesos...<br />

Este último rasgo <strong>de</strong> elocuencia pareció<br />

sublime a Chicot, e inclinó su ánimo a la<br />

compasión.<br />

-¡Ya están ahí, justo Dios! -gritó Gorenflot<br />

procurando levantarse, pero sin po<strong>de</strong>r conseguirlo-;<br />

¡ya están ahí, ya vienen, muerto soy!<br />

¡Oh, mi buen señor Chicot! auxiliadme.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!