13.04.2015 Views

confesiones-de-un-ganster-economico-john-perkins1

confesiones-de-un-ganster-economico-john-perkins1

confesiones-de-un-ganster-economico-john-perkins1

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

elclub<strong>de</strong>lsoftware.blogspot.com<br />

organizaciones <strong>de</strong> inteligencia estado<strong>un</strong>i<strong>de</strong>nses se hallaban <strong>de</strong>cididas a contrariar<br />

los <strong>de</strong>signios <strong>de</strong>l presi<strong>de</strong>nte Cárter, y que si fuese necesario no titubearían en<br />

sobOmar a los jefes militares panameños a fin <strong>de</strong> sabotear las negociaciones <strong>de</strong>l<br />

tratado. 4 No pu<strong>de</strong> <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> preg<strong>un</strong>tarme si los chacales estarían rondando ya a<br />

Torrijos.<br />

Yo había visto <strong>un</strong>a fotografía en la sección «Gente» <strong>de</strong> la revista Time, o quizá<br />

fuera en Newsweek, en la que Torrijos aparecía re<strong>un</strong>ido con Greene. El titular <strong>de</strong>cía<br />

que el escritor era <strong>un</strong> invitado especial que había llegado a ser <strong>un</strong> buen amigo. Me<br />

preg<strong>un</strong>té qué le parecería al general eso <strong>de</strong> que el novelista, en quien por lo visto<br />

confiaba, hubiese escrito <strong>un</strong> artículo tan crítico.<br />

Este artículo <strong>de</strong> Graham Greene planteaba otro interrogante, vinculado con<br />

aquel día <strong>de</strong> 1972 en que me vi cara a cara con Torrijos con <strong>un</strong>a mesita y <strong>un</strong>os<br />

servicios <strong>de</strong> café por medio. En aquella época yo había dado por supuesto que<br />

Torrijos sabía que el juego <strong>de</strong> la ayuda externa estaba planteado para hacerle rico<br />

a él mientras el país quedaba sumido en el en<strong>de</strong>udamiento. Estaba seguro <strong>de</strong> que<br />

no ignoraba que el proceso se basaba en el supuesto <strong>de</strong> que todos los hombres son<br />

corruptibles, y que su <strong>de</strong>cisión <strong>de</strong> no lucrarse personalmente y <strong>de</strong> aplicar la ayuda<br />

extranjera en verda<strong>de</strong>ro beneficio <strong>de</strong> su pueblo sería consi<strong>de</strong>rada por alg<strong>un</strong>os <strong>un</strong>a<br />

amenaza capaz <strong>de</strong> arruinar todo el sistema. El m<strong>un</strong>do miraba a ese hombre, y sus<br />

actos tenían ramificaciones que iban mucho más allá <strong>de</strong> Panamá y por tanto no<br />

serían tomados a la ligera.<br />

Me había preg<strong>un</strong>tado cómo reaccionaría la corporatocracia si los créditos<br />

concedidos a Panamá se empleaban en beneficio <strong>de</strong> los pobres sin contribuir a <strong>un</strong>a<br />

<strong>de</strong>uda impagable. Ahora me preg<strong>un</strong>taba si Torrijos se arrepentiría <strong>de</strong>l acuerdo<br />

alcanzado conmigo aquel día —por mi parte, tampoco estaba muy seguro <strong>de</strong><br />

haber acertado. Había renegado <strong>de</strong> mi papel <strong>de</strong> gángster económico. Había<br />

jugado su partida, no la mía, al aceptar su proposición <strong>de</strong> sinceridad mutua a<br />

cambio <strong>de</strong> más contratos. En términos puramente económicos había sido <strong>un</strong>a<br />

<strong>de</strong>cisión beneficiosa para MAIN. Pero <strong>de</strong> todas maneras contra<strong>de</strong>cía lo que me<br />

había enseñado Claudine, puesto que no favorecía la expansión <strong>de</strong>l imperio<br />

global. ¿Se había soltado a los chacales?<br />

Recuerdo que el día que salí <strong>de</strong>l b<strong>un</strong>galow <strong>de</strong> Torrijos pensé que la historia <strong>de</strong><br />

Latinoamérica ab<strong>un</strong>daba <strong>de</strong>masiado en héroes muertos. Un sistema basado en<br />

corromper a los personajes públicos no suele ser piadoso con los personajes<br />

públicos que se niegan a ser corrompidos.<br />

En ese momento creí ver visiones. Una figura conocida cruzaba la recepción a<br />

paso lento. Estaba tan confuso que llegué a creer que era<br />

135

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!