11.07.2015 Views

FLORES PARA ALGERNON - Facultad de Psicología

FLORES PARA ALGERNON - Facultad de Psicología

FLORES PARA ALGERNON - Facultad de Psicología

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—De acuerdo, Charlie. Fuera <strong>de</strong>l laboratorio, fuera <strong>de</strong> la universidad, pero no solos. Nocreo que <strong>de</strong>bamos permanecer solos, juntos.—Don<strong>de</strong> quiera —dije ansiosamente—. Simplemente para que pueda estar con usted yno pensar más en los tests, en las estadísticas, en las preguntas, en las respuestas...Frunció el ceño por un instante.—Bueno, hay unos conciertos gratuitos <strong>de</strong> primavera en el Central Park. La semanapróxima po<strong>de</strong>mos ir uno <strong>de</strong> esos conciertos.Cuando llegamos ante la puerta <strong>de</strong> su casa, se giró bruscamente y me besó en lamejilla.—Buenas noches, Charlie. Estoy contenta <strong>de</strong> que me hayas llamado. Hasta mañana enel laboratorio.Cerró tras ella la puerta y permanecí ante su casa, mirando la luz <strong>de</strong> la ventana <strong>de</strong> suapartamento, hasta que se apagó.Ahora ya no tengo ninguna duda. Estoy enamorado.11 <strong>de</strong> mayo. Tras tantas reflexiones y torturas, acabo <strong>de</strong> darme cuenta <strong>de</strong> que Alicetenía razón. Tengo que confiar en mi intuición. En la pana<strong>de</strong>ría, observé a Gimpy <strong>de</strong> muycerca. Hoy le he visto contar tres veces <strong>de</strong> menos a los clientes y embolsarse su parte <strong>de</strong>la diferencia cuando estos le daban alguna moneda. No lo hacía más que con algunosclientes regulares, y se me ocurrió pensar que esas personas eran tan culpables como él.Ese compromiso no hubiera existido sin su acuerdo. ¿Por qué tenía que ser Gimpy elchivo expiatorio?Así que me <strong>de</strong>cidí por un compromiso. Quizá no fuera la <strong>de</strong>cisión i<strong>de</strong>al pero era la mía,y me pareció ser la mejor solución dadas las circunstancias. Le diría a Gimpy lo que sabíay le aconsejaría que <strong>de</strong>jara <strong>de</strong> hacerlo.Lo encontré a solas cerca <strong>de</strong> los lavabos y, cuando me vio acercarme, quiso irse por elotro lado.—Quisiera hablarle <strong>de</strong> un serio problema sobre el que querría saber su opinión —ledije—. Un amigo mío ha <strong>de</strong>scubierto que uno <strong>de</strong> sus compañeros <strong>de</strong> trabajo le roba a supatrón. La i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> <strong>de</strong>nunciarlo y crearle problemas no le gusta, pero no quiere quedarsequieto viendo como su patrón, que ha sido muy bueno con ambos, es robado.Gimpy me miró escrutadoramente.—¿Y qué es lo que piensa hacer tu amigo?—Esta es la dificultad. No siente <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> hacer nada. Se dice a sí mismo que, si losrobos cesan, no va a ganar nada haga lo que haga, así que lo olvidará todo.—Tu amigo haría mejor ocupándose <strong>de</strong> sus propios asuntos —dijo Gimpy, cambiandosu pie malo <strong>de</strong> posición—. Sería mejor que mantuviera los ojos cerrados sobre este tipo<strong>de</strong> cosas y supiera don<strong>de</strong> están sus verda<strong>de</strong>ros amigos. Un patrón es un patrón, y lagente que trabaja <strong>de</strong>be ganarse la vida.—Mi amigo no comparte este sentimiento.—Nada <strong>de</strong> eso le incumbe.—Pero piensa que, puesto que sabe, es parcialmente responsable. Así que ha <strong>de</strong>cididoque, si la cosa se <strong>de</strong>tiene, no tendrá nada más que <strong>de</strong>cir. Si no, lo dirá todo. Quisierapedirle su opinión. ¿Cree que, en esas condiciones, cesarán los robos?Le costaba dominar su cólera. Me daba cuenta <strong>de</strong> que <strong>de</strong>seaba golpearme, pero secontentó con apretar los puños.—Dile a tu amigo que el otro no parece tener otra elección.—Estupendo —dije—. Esto le dará mucha alegría.Gimpy se giró para irse, pero se <strong>de</strong>tuvo y me miró.—Tu amigo... ¿acaso no <strong>de</strong>seará también tener su parte? ¿Es esa la razón?—No. Sólo quiere que todo ese asunto se acabe.Me echó una furiosa mirada.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!