28.02.2019 Views

Caliban y la bruja

Calibán y la bruja presenta las principales líneas de un proyecto de investigación sobre las mujeres en la «transición» del feudalismo al capitalismo que comencé a mediados de los setenta, en colaboración con la feminista italiana Leopoldina Fortunati. Sus primeros resultados aparecieron en un libro que publicamos en Italia en 1984, Il Grande Calibano. Storia del corpo social ribelle nella prima fase del capitale [El gran calibán. Historia del cuerpo social rebelde en la primera fase del capital] (Milán, Franco Agneli). Mi interés en esta investigación estuvo motivado en origen por los debates que acompañaron el desarrollo del Movimiento Feminista en Estados Unidos, en relación a las raíces de la «opresión» de las mujeres y las estrategias políticas que el propio movimiento debía adoptar en la lucha por su liberación. En ese momento, las principales perspectivas teóricas y políticas desde las que se analizaba la realidad de la discriminación sexual venían propuestas por dos ramas del movimiento de mujeres, principalmente: las feministas radicales y las feministas socialistas.

Calibán y la bruja presenta las principales líneas de un proyecto de investigación sobre las mujeres en la «transición» del feudalismo al capitalismo que comencé a mediados de los setenta, en colaboración con la feminista italiana Leopoldina Fortunati. Sus primeros resultados aparecieron en un libro que publicamos en Italia en 1984, Il Grande Calibano. Storia del corpo social ribelle nella prima fase del capitale [El gran calibán. Historia del cuerpo social rebelde en la primera fase del capital] (Milán, Franco Agneli).
Mi interés en esta investigación estuvo motivado en origen por los debates que acompañaron el desarrollo del Movimiento Feminista en Estados Unidos, en relación a las raíces de la «opresión» de las mujeres y las estrategias políticas que el propio movimiento debía adoptar en la lucha por su liberación. En ese momento, las principales perspectivas teóricas y políticas desde las que se analizaba la realidad de la discriminación sexual venían propuestas por dos ramas del movimiento de mujeres, principalmente: las feministas radicales y las feministas socialistas.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

192 Calibán y <strong>la</strong> <strong>bruja</strong><br />

Como veremos, Descartes y Hobbes expresan dos proyectos diferentes<br />

en re<strong>la</strong>ción con <strong>la</strong> realidad corporal. En el caso de Descartes, <strong>la</strong><br />

reducción del cuerpo a materia mecánica hace posible el desarrollo de<br />

mecanismos de autocontrol que sujetan el cuerpo a <strong>la</strong> voluntad. Para<br />

Hobbes, por su parte, <strong>la</strong> mecanización del cuerpo sirve de justificación<br />

para <strong>la</strong> sumisión total del individuo al poder del Estado. En ambos, sin<br />

embargo, el resultado es una redefinición de los atributos corporales<br />

que, al menos idealmente, hacen al cuerpo apropiado para <strong>la</strong> regu<strong>la</strong>ridad<br />

y el automatismo exigido por <strong>la</strong> disciplina del trabajo capitalista. 16<br />

Pongo el énfasis en el «idealmente» porque, en los años en que Descartes<br />

y Hobbes escribían sus tratados, <strong>la</strong> c<strong>la</strong>se dominante tenía que enfrentarse<br />

con una corporalidad que era muy diferente de <strong>la</strong> que aparecía<br />

en <strong>la</strong>s prefiguraciones de estos filósofos.<br />

De hecho, es difícil reconciliar los cuerpos insubordinados que rondan<br />

<strong>la</strong> literatura social del «Siglo de Hierro» con <strong>la</strong>s imágenes de relojes<br />

por medio de <strong>la</strong>s cuales Descartes y Hobbes representaban al cuerpo en<br />

sus trabajos. No obstante, aun cuando aparentemente están distanciadas<br />

de los asuntos cotidianos de <strong>la</strong> lucha de c<strong>la</strong>ses, es en <strong>la</strong>s especu<strong>la</strong>ciones<br />

de estos dos filósofos donde se encuentra <strong>la</strong> primera conceptualización<br />

de <strong>la</strong> transformación del cuerpo en una máquina de trabajo, lo que<br />

constituye una de <strong>la</strong>s principales tareas de <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción primitiva.<br />

Cuando, por ejemplo, Hobbes dec<strong>la</strong>ra que «el corazón (no es) sino un<br />

resorte […] y <strong>la</strong>s articu<strong>la</strong>ciones sino varias ruedas», percibimos en sus<br />

pa<strong>la</strong>bras un espíritu burgués, en el que no sólo el trabajo es <strong>la</strong> condición<br />

y motivo de existencia del cuerpo, sino que también siente <strong>la</strong> necesidad de<br />

transformar todos los poderes corporales en fuerzas de trabajo.<br />

Este proyecto constituye una pista a <strong>la</strong> hora de comprender por qué<br />

tanta especu<strong>la</strong>ción filosófica y religiosa de los siglos XVI y XVII está<br />

compuesta de una verdadera vivisección del cuerpo humano, por medio<br />

de <strong>la</strong> cual se decidía cuáles de sus propiedades podían vivir y cuáles, en<br />

cambio, debían morir. Se trataba de una alquimia social que no con-<br />

16 De particu<strong>la</strong>r importancia, en este contexto, fue el ataque a <strong>la</strong> «imaginación» (vis imaginativa)<br />

que en <strong>la</strong> magia natural de los siglos XVI y XVII era considerada una fuerza poderosa por medio<br />

de <strong>la</strong> cual el mago podía afectar al mundo circundante y traer «salud o enfermedad, no sólo a su<br />

propio cuerpo sino también a otros cuerpos» (Easlea, 1980: 94 y sig.). Hobbes dedicó un capítulo<br />

del Leviatán a demostrar que <strong>la</strong> imaginación sólo es un «sentido en decadencia», simi<strong>la</strong>r en esto a<br />

<strong>la</strong> memoria, sólo que ésta viene gradualmente debilitada por el tras<strong>la</strong>do de los objetos de nuestra<br />

percepción (Parte I, Capítulo 2); también puede encontrarse una crítica de <strong>la</strong> imaginación en<br />

Religio Medici (1642), de Sir Thomas Browne.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!