Número 99 - Biblioteca Digital del CONEVyT

• La drástica disminución de becas para los alumnos en edad escolar,
donde antes, por ejemplo, un alumno de cada grupo de clase recibía
apoyo alimentario y económico, hoy se haya reducido a uno por escuela.
• La carencia de programas efectivos de capacitación y actualización para
que los supervisores y directivos escolares, ejerzan su función de
liderazgo.
• El desprecio por estimular real-mente la educación física, artís-tica y
cívica, actividades eminen- temente formativas.
• El no funcionamiento en forma real de los Consejos Técnicos Escolares
ni los Consejos de Participación Social.
• Ausencia de una política de concertación entre autoridades escolares y
padres de familia.
Es importante relevar cómo la carencia de una adecuada comunicación
dificulta la marcha del sistema educativo y ésta ha sido una de las
fallas más importantes de quienes han tenido a su cargo la administración
de la educación en la entidad, prueba de ello es la inexistencia de
medios de comunicación propios, ni radiofónicos, periódicos impresos o
televisivos, muestra de ello es que la publicación oficial de la
Secretaría, es una revista semestral, con mal diseño, contenidos
dispersos y poco o nada conocida por el magisterio.
En fin, pueden mencionarse muchas cosas más que el magisterio en
servicio padece día con día, pero podemos concluir que la desatención de
las responsabilidades, fue la tónica del sexenio en el campo educativo,
de un sistema que no podía funcionar aceptablemente en virtud de la
puesta en práctica de una manera permanente de un fenómeno que los
maestros llaman el “contratismo” que consistió en que al desocuparse una
plaza, ya fuera por ascenso o jubilación, la misma no era cubierta en
tiempo y forma, dejando a los grupos escolares solos por varios meses, no
siendo cubierta la plaza, misma que ya fuera por la Federación o el
Estado, contaba con una partida asignada. Este hecho se repitióvarias
veces.
La situación anterior plantea la duda de a dónde fueron a parar dichos
recursos destinados al sistema educativo y si la Secretaría de Educación
fue la “caja chica” del gobierno en turno, ello en virtud de que, como
quedó consignado en los medios periodísticos, en una ocasión el
exgobernador y actual Secretario
de Economía Fernando Canales, manifestó que (en un año determinado) les
habían quedado en educación muchos recursos, mismos que se destinarían al
arreglo de caminos y carreteras del Estado.
Muchas cosas son las que deberán modificarse, algunas de carácter
reglamentario que además tienen un significado de carácter ético, como el
hecho de que el titular de la Secretaría de Educación en el Estado,
reciba dos salarios, uno como Secretario estatal y otro como Delegado de
la SEP, dado que esa partida todavía se encuentra con-templada en la
instancia que se denominó como “Unidad de Transferencia”, mecanismo legal
por la cual el Estado recibe los bienes y recursos de la Federación, a
partir de la puesta en práctica de la federalización educativa, la cual
cumple ya cerca de una década.
A pesar de sus bondades y sus problemas, el sistema educativo del
estado de Nuevo León ha seguido funcionando gracias a la entrega y
responsabilidad de miles de maestros y maestras, que desde la escuela,
han sabido mantener su dignidad y cumplir con su responsabilidad,
afortunadamente en Nuevo León, existen muchos casos de este carácter, de
personas que a pesar de las autoridades, han sabido ser verdaderos