ESTRACTO

DE r, IS[lEllESAS y PASTOS. 185
fiarte, y las del i años qlle estaban aplicadas para el ganado
hacuno , se reduzcan á pasto como lo eran antes.
G.!'íin:!:u[1o arriende dehesas de yerba, no teniendo
;.;anados p,lra ellas, so pena de perdillliento de la mitad
di' sus hicncs , }' no valga el arrendamiento. El que turiere
ganado pueda arrendar la yerba necesaria para él,
: una tercera parte mas : y si alguna le sobre y quiera
venderla , ha de darla á otro Iluetenga ganado por el mismo
precio que le costó, sin llevarle mas, só pena de perr!t'r
tildo Sil ;.:anado.
J. Los que tengan ,1000 ú mas cabezasdeganado ove­
[uno , y pasten con ellas en dehesas, sean obligados á tener
con cada millar de ovejas y cameros seis bacas de
cria. Teniendo los concejos dehesas, boyales o prados CO[1­
cejiles para solo el ganado de labor; v siendo bastantes
para ello, el que labre con dos pares de bueyes ó un par
de ruulas, pueda traer una haca cerril de cria en la tal
dehesa o prado; y si cupieren en ella mas cabezas, cada
vecino de! IHlI'hlo'lJIleda traer una haca de cria.
8. Las duhesas que hubiesenestado á pasto, y sin rornper
ni labrar por 20 años contínuos, antes ó después de
ia lpy precedente, se reduzcan á llasto y no puedan mas
romperse, pena de '2 mil maravecis por cada fanegarota,
110 excediendo de 20 mil la condena por la primera vez,
y ¡lOr la sef!u, nda, doble pena aplicada por terceras Il artes
;\ a Cámara, Juezv denunciador.
(l. Las dehesas'de particulares, ú de pueblosy comunidades,
y los términos públicos, ejidos y valdíos que se
hubieren roto sin licencia desde el alío de ,1 [j90, se reduzcan
á pasto; y tamhieu las que habiéndose roto con
facultad, tengan cumplido el tiempo de su coucesion.Para
¡IUC se entienda qué dehesas son estas, las justicias enrien
testimonio de lo que actualmente se rompa con licencia
ú sin ella, en la forma que esta ley previene. No
se conceda en adelante licencia alguna para romper por
ninguu Consejo, Junta ó Tribunal, aunque se otorgue por
causa publica: sean nulas las (Iue sedieren, y castigadoslos
que usen de ellas; y el Consejo no las dé sino con causa
Ilt'c('saria y de heucficio público, v con audiencia del procurador
del Rcvno, concurriendo las dos partes del Con­
-ejo, y consultando ,1 S. .\1.= 2. Se reconozcan y apeen
!{Idas las dehesas y pastos públicos ante las justicias de