Práctica vinícola o sea Procedimientos ciertos y seguros para la ...

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4.° Ceniza de orujo ó de sarmiento.—Hace desaparecer la
acidez incipiente, usándola de igual modo que las demás
sustancias pero decolora mucho al vino.
De las sustancias enumeradas y de otras muchas que se
recomiendan para obtener el mismo resultado, las dos primeras
son las que reconocemos como más eficaces, debiendo
hacerse uso de las demás enumeradas tan sólo en el caso único
de no poder disponer de aquellas.
Una vez que la enfermedad haya desaparecido, debe procurar
el cosechero dar pronta salida al vino, porque si aquella
volviera á reaparecer, sería ya muy difícil su corrección.
COLOR PARDO Ó AMAPOLADO DE LOS VINOS'. SU CORRECCIÓN.
Cuando durante la vendimia sobrevienen aguas abundantes,
que producen la descomposición de la uva ya sazonada,
cuando la fermentación ha sido incompleta, ó han mediado
otras causas, sucede que el color natural del vino empieza á
descomponerse, tornándose pardo y turbio, y apareciendo
insípido. Este defecto se nota tan luego como se le separa
de la madre, ó cuando llegan los calores del estío, y conviene
hacerle desaparecer. Para ello, se trasiega el vino á una
vasija bien azufrada, se la adiciona alguna cantidad de alcohol,
y 15 ó 20 gramos de ácido tártrico, disuelto en agua,
por cada hectolitro de vino: se le pone una materia colorante
(oenolina), y ácido salicílico ó polvos de Martín Pagis, y
se lo clarifica.
VINOS QUE SE CIERRAN Ó ENTURBIAN DESPUÉS DE EXTRAÍDOS
DE LA MADRE.
Como quiera que reconozcan las mismas causas que aquellos
de que nos acabamos de ocupar, el remedio que se les
aplique ha de ser también el mismo, advirtiendo que en uno