21.02.2019 Views

te odiare hasta que te quiera

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

con palo<strong>te</strong>s en las paredes —pro<strong>te</strong>sta Cole, y yo disimulo una sonrisa.<br />

La verdad es <strong>que</strong> da el pego, ahí sentado con su camiseta imperio y sus<br />

va<strong>que</strong>ros. Lleva el pelo más alborotado <strong>que</strong> de costumbre y tiene partido<br />

el labio superior. Normalmen<strong>te</strong> no soy muy partidaria del look<br />

desaliñado, prefiero a los hombres bien aseaditos y sin an<strong>te</strong>ceden<strong>te</strong>s<br />

penales.<br />

Sin embargo, hay algo en él <strong>que</strong> me resulta de lo más atractivo.<br />

—Solo han pasado dos horas, no seas nenaza.<br />

—Prueba a me<strong>te</strong>r<strong>te</strong> aquí y luego me cuentas. ¡Eh, agen<strong>te</strong>!<br />

Meto una mano entre los barro<strong>te</strong>s y le doy un empujón en el pecho.<br />

—¡Cálla<strong>te</strong>! Si lo seguimos molestando, <strong>te</strong> me<strong>te</strong>rá con ese otro tío.<br />

Le echo un vistazo al tipo <strong>que</strong> ocupa la celda de enfren<strong>te</strong> y un escalofrío<br />

me recorre el cuerpo. Por lo visto, el muy as<strong>que</strong>roso había puesto<br />

cámaras en los vestidores de la tienda en la <strong>que</strong> trabaja. Lleva<br />

sonriéndome desde <strong>que</strong> llegué y empiezo a estar un poco paranoica, como<br />

si fuera una de las protagonistas de sus cintas. El agen<strong>te</strong> Greene me ha<br />

asegurado <strong>que</strong> es del pueblo de al lado, pero aun así no creo <strong>que</strong> pueda<br />

recuperar la fe en ningún vestidor del mundo.<br />

—Me mira como si fuera un trozo de carne. Qué quieres <strong>que</strong> <strong>te</strong> diga,<br />

empiezo a sentirme un poco violenta.<br />

Cole se estremece y yo le pongo los ojos en blanco.<br />

—¡Eh, no seas tan engreído <strong>que</strong> me está mirando a mí!<br />

—¿Estás ciega? Es eviden<strong>te</strong> <strong>que</strong> babea por mí, pero no es culpa suya,<br />

pobre.<br />

—¿Lo dices en serio? ¿Es <strong>que</strong> no has visto <strong>que</strong> no deja de sonreírme?<br />

—Más bien <strong>te</strong> fulmina con la mirada, se nota <strong>que</strong> no le gusta <strong>que</strong> estés<br />

tan cerca de mí —replica Cole, y su rostro se transforma en el del capullo<br />

arrogan<strong>te</strong> <strong>que</strong> conozco desde <strong>que</strong> era pe<strong>que</strong>ña.<br />

—Mira <strong>que</strong> eres creído, cabezón, narcisista y...<br />

—¿Dónde está? ¿Dónde está mi hijo, John? —oigo <strong>que</strong> pregunta la<br />

señora Stone, y me callo de inmediato.<br />

Cole empalidece y sus ojos se desvían rápidamen<strong>te</strong> hacia el origen de la<br />

voz. Se coge a los barro<strong>te</strong>s de la celda y susurra:<br />

—Si no salgo vivo del calabozo, dile a la gen<strong>te</strong> del instituto <strong>que</strong> me<br />

asesinó un tío con un hacha.<br />

—Qué hay más masculino <strong>que</strong> morir bajo los tacones de una mujer,<br />

¿eh, Cole?

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!