21.02.2019 Views

te odiare hasta que te quiera

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>te</strong>nía cuatro años. Yo era muy pe<strong>que</strong>ña y apenas llegué a conocerla, pero<br />

mi madre siempre me decía <strong>que</strong> era una mujer maravillosa y <strong>que</strong> Cole era<br />

igualito a ella. Sé <strong>que</strong> me está diciendo la verdad, <strong>que</strong> está siendo sincero.<br />

—¿Y por qué no vinis<strong>te</strong> a verme?<br />

—Lo in<strong>te</strong>nté. Me pasé por tu casa. No sabía lo de Travis y sus<br />

problemas con la bebida, pero en cuanto me vio perdió el control. In<strong>te</strong>nté<br />

decirle <strong>que</strong> yo solo <strong>que</strong>ría disculparme, pedir<strong>te</strong> perdón por todo lo <strong>que</strong> <strong>te</strong><br />

había hecho, pero no me dejó. Supongo <strong>que</strong> le toqué mucho las pelotas<br />

por<strong>que</strong> casi me rompe la nariz.<br />

—¿Qué? —exclamo y me bajo de la encimera de un salto.<br />

Le pongo las manos en los hombros y lo obligo a mirarme.<br />

—Por favor, dime <strong>que</strong> eso no es verdad —le suplico.<br />

—Él no tiene la culpa. Yo era el imbécil <strong>que</strong> se dedicaba a hacerle la<br />

vida imposible a su hermana, me lo merecía.<br />

—No, no lo entiendes. Travis siempre supo <strong>que</strong> yo <strong>te</strong> gustaba, él no<br />

haría una cosa así. Tuvo <strong>que</strong> ser el alcohol. Por suer<strong>te</strong>, ya no es esa<br />

persona.<br />

—Lo sé, Tessie, de verdad. No hace falta <strong>que</strong> lo defiendas. Lo <strong>que</strong> no <strong>te</strong><br />

dijo es <strong>que</strong> me había visto, ¿verdad? Ni cuando me fui ni cuando volví.<br />

Yo respondo <strong>que</strong> no con la cabeza. Estoy tris<strong>te</strong> y al mismo tiempo<br />

cabreada. Tendría <strong>que</strong> habérmelo contado, no <strong>te</strong>nía derecho a guardar un<br />

secreto <strong>que</strong> no le per<strong>te</strong>necía, pero se había convertido en otra persona. Sus<br />

días y sus noches estaban consagrados a la bebida y nada más. No estaba<br />

en sus cabales, ni si<strong>quiera</strong> podía man<strong>te</strong>ner una conversación civilizada y<br />

mucho menos recordarla.<br />

—Pero ¿sabes qué?, <strong>te</strong> vi. Cuando me iba, <strong>te</strong> vi desde el coche y por eso<br />

decidí volver en otoño.<br />

Sus palabras me confunden aún más. Estudio la expresión de su cara e<br />

in<strong>te</strong>nto en<strong>te</strong>nder qué le hizo volver.<br />

—Estabas sentada en la acera. Tenías la cabeza apoyada en las rodillas,<br />

pero enseguida supe <strong>que</strong> eras tú. Llevabas a<strong>que</strong>lla sudadera de Batman, <strong>que</strong><br />

siempre <strong>te</strong> ponías para ir a clase. En cuanto la vi, supe <strong>que</strong> eras tú. Te<br />

<strong>te</strong>mblaban los hombros, pero no sé si estabas llorando o riéndo<strong>te</strong>.<br />

Sé a qué día se refiere, lo recuerdo perfectamen<strong>te</strong>, tanto <strong>que</strong> me pongo<br />

colorada como un toma<strong>te</strong>. Si hubiera visto lo <strong>que</strong> ocurrió después, ahora<br />

me sentiría aún más patética de lo <strong>que</strong> ya me siento por haberme dejado<br />

avasallar duran<strong>te</strong> tanto tiempo. Recuerdo el encontronazo con Nicole y sus

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!