21.02.2019 Views

te odiare hasta que te quiera

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

caído al suelo, o puede <strong>que</strong> en casa de la arpía de Kimmy no haya<br />

cobertura. Y, de pronto, la sensación más maravillosa del mundo: ¡el<br />

<strong>te</strong>léfono suena! Apenas consigo controlar la sensación de alivio <strong>que</strong> me<br />

atraviesa. Veo las palabras en la pantalla, me da igual <strong>que</strong> solo haya dos,<br />

suficien<strong>te</strong>s para <strong>que</strong> se me dispare el corazón. Puede parecer un poco<br />

patético por mi par<strong>te</strong>, pero al menos significa <strong>que</strong> le importo.<br />

«¿Estás bien?»<br />

«No.»<br />

«¿Qué pasa?»<br />

An<strong>te</strong>s de <strong>que</strong> pueda formular una respuesta en la <strong>que</strong> le expli<strong>que</strong> <strong>que</strong> me<br />

está rompiendo el corazón sin dramatismos, el <strong>te</strong>léfono empieza a sonar.<br />

Es el tono <strong>que</strong> le asigné a Cole no hace mucho, el «The Only Exception»<br />

de Paramore. Me tiemblan las manos. Deslizo los dedos por la pantalla<br />

para descolgar y los dos respondemos al mismo tiempo.<br />

—¿Qué pasa?<br />

—¿Dónde estás?<br />

Repito la pregunta.<br />

—¿Dónde estás?<br />

—Tessie, responde, por favor. ¿Estás bien? ¿Te duele algo?<br />

—Sí y sí a la segunda pregunta —murmuro y oigo una respiración<br />

profunda al otro lado del <strong>te</strong>léfono.<br />

Me lo imagino pasándose la mano por el pelo y tirando de él con<br />

fuerza.<br />

—No me hagas esto. ¿Qué quieres decir con <strong>que</strong> sí? Por favor, dime<br />

qué está pasando —me suplica, y por un momento me siento cruel.<br />

Me ha dejado sola. Se ha levantado y se ha ido después de hacerme<br />

pasar una nochecita de pesadilla. Quiero <strong>que</strong> se sienta mal. Quiero <strong>que</strong><br />

sufra, pero al mismo tiempo estoy tan enamorada de él <strong>que</strong> la idea de<br />

hacerle daño me resulta imposible.<br />

—Te has ido. No me has dejado <strong>que</strong> me explicara, ni si<strong>quiera</strong> <strong>te</strong> has<br />

molestado en hablar conmigo. Simplemen<strong>te</strong> <strong>te</strong> has ido.<br />

Enfatizo las últimas cuatro palabras y confío en <strong>que</strong> comprenda su<br />

importancia. Sabe perfectamen<strong>te</strong> <strong>que</strong> me está costando superar la<br />

sensación de abandono. Si, aún sabiendo eso, ha sido capaz de levantarse e<br />

irse, es él el <strong>que</strong> debería sentirse culpable. No me puedo permitir el lujo de<br />

<strong>que</strong> otra persona más deser<strong>te</strong> de mi vida por<strong>que</strong> yo no estoy a la altura.<br />

—Por favor, bizcochito, no <strong>te</strong> enfades... Necesitaba un poco de espacio.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!