21.02.2019 Views

te odiare hasta que te quiera

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Soy conscien<strong>te</strong> de <strong>que</strong> estamos parados delan<strong>te</strong> de mi casa, pero me<br />

<strong>que</strong>do aquí sentada, con la barbilla <strong>te</strong>mblando y los ojos llenos de<br />

lágrimas. Por fin me he trastocado del todo, es hora de llamar al<br />

manicomio. Siento la necesidad de cabrearme y montar un buen pito<strong>te</strong>. De<br />

pronto, me resulta imposible soportar la combinación entre las hormonas<br />

al<strong>te</strong>radas y el abandono de mi madre. Cole también se va, seguramen<strong>te</strong> a<br />

correrse una buena juerga con sus amigos los delincuen<strong>te</strong>s. Habrá<br />

mujeres, mo<strong>te</strong>ras macizas y tatuadas con piercings en sitios en los <strong>que</strong> ni<br />

si<strong>quiera</strong> sabía <strong>que</strong> se pudieran llevar. Cuando me dé cuenta, ya estará<br />

montándoselo con una tal Yolanda y me dirá <strong>que</strong> me vaya a tomar por<br />

saco, <strong>que</strong> no molo lo suficien<strong>te</strong> para él.<br />

—Vale, ve<strong>te</strong>, pása<strong>te</strong>lo genial.<br />

El sarcasmo <strong>que</strong> me sale por la boca escuece, incluso a mí misma, pero<br />

no puedo parar. Cojo la mochila, me levanto del asiento y cierro de un<br />

portazo. Él también se baja, al menos es lo <strong>que</strong> me parece oír, y cada<br />

sonido <strong>que</strong> hace basta para <strong>que</strong> me ponga de los nervios.<br />

—Eh, espera. ¿He hecho algo malo?<br />

Aprieto los dien<strong>te</strong>s. ¿Cómo puede ser <strong>que</strong> los chicos sean todos tan<br />

despistados? Estoy a punto de explotar, necesito chocola<strong>te</strong> cuanto an<strong>te</strong>s y<br />

solo me ape<strong>te</strong>ce cavar un agujero en el suelo y esconderme.<br />

—Por favor, ve<strong>te</strong>. No me ape<strong>te</strong>ce hablar.<br />

—No, no me voy. Entiendo lo <strong>que</strong> <strong>te</strong> pasa, Tessie; ha sido una semana<br />

difícil por tu madre y por otras cosas.<br />

Se pone colorado al mencionar esas «otras cosas» y yo quiero<br />

morirme. No puedo creer <strong>que</strong> esté hablando de la regla con Cole. Él sigue<br />

hablando, ajeno a mi malestar.<br />

—Pero no puedes apartarme. No pienso permitir <strong>que</strong> nuestra primera<br />

pelea sea por algo tan estúpido.<br />

—¿Estúpido? ¿Que mi madre se haya ido <strong>te</strong> parece estúpido? Pues lo<br />

siento, ¡siento haber<strong>te</strong> hecho perder el tiempo contándo<strong>te</strong> mis estupideces!<br />

—No <strong>que</strong>ría decir eso —pro<strong>te</strong>sta Cole—, me refería a <strong>que</strong> yo me vaya<br />

unos días. Si prefieres <strong>que</strong> no vaya, dilo.<br />

—De ninguna manera, no permitas <strong>que</strong> mi estupidez y yo <strong>te</strong> arruinemos<br />

la diversión, Cole. Venga, adelan<strong>te</strong>, haz lo <strong>que</strong> <strong>quiera</strong>s pero déjame en paz.<br />

In<strong>te</strong>nto irme pero me coge del brazo, y estoy a punto de estallar cuando,<br />

de pronto, aparece Travis en el porche. Supongo <strong>que</strong> nos ha oído discutir<br />

o más bien me ha oído a mí comportándome como una auténtica arpía.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!