21.02.2019 Views

te odiare hasta que te quiera

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

cerebro propio.<br />

—Vale, me parece razonable. Le comentaré los cambios a tu<br />

acompañan<strong>te</strong>, creo <strong>que</strong> el pobrecillo se alegrará de no <strong>te</strong>ner <strong>que</strong> llevar una<br />

corbata rosa a juego.<br />

El corazón me da un vuelco.<br />

—¿Qué acompañan<strong>te</strong>?<br />

—Eh, compañera.<br />

Cole me da un empujón en el hombro y yo lo fulmino con la mirada.<br />

—No estés tan con<strong>te</strong>nto, esto no ha sido idea mía.<br />

—Cuando la vida <strong>te</strong> da limones, Tessie...<br />

Deja la frase a medias, arranca el coche y salimos de su garaje.<br />

—Los aplastas <strong>hasta</strong> arrancarles el último aliento de vida y luego los<br />

tiras a la basura, genio —replico.<br />

Por el rabillo del ojo veo <strong>que</strong> Cole está sonriendo y <strong>te</strong>ngo <strong>que</strong><br />

aguantarme para no sonreír yo también. Me vuelvo hacia la ventanilla y<br />

simulo <strong>que</strong> miro hacia fuera.<br />

—Entonces ¿estás bien? —pregunta, y entiendo <strong>que</strong> se refiere al<br />

inciden<strong>te</strong> con Jay.<br />

Supongo <strong>que</strong> las cosas van por buen camino. A Travis le está costando<br />

cambiar su rutina y volver a la normalidad, pero al menos se esfuerza. Lo<br />

he convencido para <strong>que</strong> se apun<strong>te</strong> a un par de cursos online y se ponga las<br />

pilas con la carrera. La bebida sigue siendo un problema, pero a todo el<br />

mundo <strong>que</strong> sufre una adicción le cuesta superar el síndrome de<br />

abstinencia.<br />

—De hecho, estoy mejor <strong>que</strong> bien. Por primera vez, siento <strong>que</strong> mi<br />

familia está haciendo progresos.<br />

Le dedico una sonrisa cálida y al principio él se <strong>que</strong>da como aturdido,<br />

sin responder, mirándome.<br />

—¿Qué? —pregunto, un poco desconcertada.<br />

—Nada —responde él moviendo la cabeza, y luego me regala la sonrisa<br />

encantadora <strong>que</strong> estaba esperando—. Nada —repi<strong>te</strong>—, solo <strong>que</strong> deberías<br />

sonreír más a menudo.<br />

Me derrito un poco al oír sus palabras y ni si<strong>quiera</strong> me doy cuenta de<br />

<strong>que</strong> nos hemos incorporado a la autopista. Vamos a un centro comercial<br />

<strong>que</strong> hay a un par de pueblos de aquí en busca de un vestido para la gala. Le

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!