13.06.2013 Views

CAPÍTULO XXXI - iglesia bautista getsemani de montreal

CAPÍTULO XXXI - iglesia bautista getsemani de montreal

CAPÍTULO XXXI - iglesia bautista getsemani de montreal

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

anhela liberarse <strong>de</strong> ello, que se le vuelve la espalda, cualquiera que sea, al mundo tanto en forma<br />

<strong>de</strong> pensar, como en perspectiva, como en práctica, y se niega uno a sí mismo para tomar la cruz y<br />

seguir a Cristo. Quizá haya que sufrir económicamente, pero no importa. Esto es<br />

arrepentimiento. El falso profeta no lo presenta así. Cura "la herida <strong>de</strong> la hija <strong>de</strong> mi pueblo con<br />

liviandad", diciendo simplemente que todo está bien, que lo único que hay que hacer es "venir a<br />

Cristo", "seguir a Jesús", o "hacerse cristiano".<br />

En última instancia, se pue<strong>de</strong> plantear así. El falso profeta no enfatiza la necesidad<br />

absoluta <strong>de</strong> entrar por la puerta estrecha y andar por el camino angosto. No nos dice que tenemos<br />

que practicar el Sermón <strong>de</strong>l Monte. Si sólo lo escuchamos sin practicarlo, estamos con<strong>de</strong>nados.<br />

Si sólo lo comentamos, sin aplicarlo, se levantará en juicio contra nosotros para con<strong>de</strong>narnos. La<br />

enseñanza falsa no se interesa por la verda<strong>de</strong>ra santidad, por la santidad bíblica. Sostiene una<br />

i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> la santidad parecida a la que tenían los fariseos. Recor<strong>de</strong>mos que escogían ciertos peca<br />

dos <strong>de</strong> los que ellos mismos no eran reos, según creían, y <strong>de</strong>cían que con tal <strong>de</strong> no ser culpables<br />

<strong>de</strong> ellos todo lo <strong>de</strong>más no importaba. ¡Ay, cuantos fariseos hoy día! La santidad se ha convertido<br />

en no hacer tres o cuatro cosas. Ya no pensamos en función <strong>de</strong> "no améis el mundo, ni las cosas<br />

que están en el mundo... los <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> la carne, los <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> los ojos, y la vanagloria <strong>de</strong> la vida"<br />

(Un. 2:15,16). "La vanagloria <strong>de</strong> la vida" es una <strong>de</strong> las mayores maldiciones en la Iglesia<br />

cristiana. La enseñanza falsa <strong>de</strong>sea una santidad como la <strong>de</strong> los fariseos. Es simplemente<br />

cuestión <strong>de</strong> no hacer ciertas cosas acerca <strong>de</strong> las que nos hemos puesto <strong>de</strong> acuerdo, porque da la<br />

casualidad que no nos atraen gran cosa. Con ello, hemos reducido la santidad a algo fácil y<br />

acudimos en masa al camino espacioso y tratamos <strong>de</strong> seguirlo.<br />

Estas son algunas <strong>de</strong> las características <strong>de</strong> estos falsos profetas que vienen disfrazados <strong>de</strong><br />

ovejas. Ofrecen siempre una salvación fácil, una clase <strong>de</strong> vida fácil. Desaconsejan el auto<br />

examen; más aún, casi sienten que examinarse a sí mismo es hereje. Dicen que no hay que<br />

examinar la propia alma. Siempre hay que "mirar a Jesús", nunca a uno mismo, para po<strong>de</strong>r<br />

<strong>de</strong>scrubrir el pecado. Desaconsejan lo que la Biblia nos aconseja que hagamos, 'examinarnos' a<br />

nosotros mismos, 'probarnos a nosotros mismos' y situarnos frente a esta última sección <strong>de</strong>l<br />

Sermón <strong>de</strong>l Monte. No les gusta el proceso <strong>de</strong> auto examen y <strong>de</strong> mortificación <strong>de</strong>l pecado que<br />

enseñaban los puritanos, y los gran<strong>de</strong>s lí<strong>de</strong>res <strong>de</strong>l siglo dieciocho —no sólo Whitefield, Wesley y<br />

Johathan Edwards. sino también el santo John Fletcher, quien, todas las noches antes <strong>de</strong><br />

acostarse, se hacía doce preguntas. No creen en esto porque es incómodo. Quieren una salvación<br />

fácil, una vida cristiana fácil. Nada conocen <strong>de</strong>l sentir <strong>de</strong> Pablo, cuando dice "los que estamos en<br />

este tabernáculo gemimos con angustia". Nada sabe acerca <strong>de</strong>l pelear "la buena batalla <strong>de</strong> la fe".<br />

No saben qué quiere <strong>de</strong>cir Pablo cuando afirma que "no tenemos lucha contra sangre y carne,<br />

sino contra principados, contra potesta<strong>de</strong>s, contra los gobernadores <strong>de</strong> las tinieblas <strong>de</strong> este siglo,<br />

contra huestes espirituales <strong>de</strong> maldad en las regiones celestes" (Ef. 6:12). No entien<strong>de</strong>n esto. No<br />

ven necesidad alguna <strong>de</strong> revestirse <strong>de</strong> la armadura toda <strong>de</strong> Dios, porque no han visto el problema.<br />

¡Todo es tan fácil!<br />

Hoy día no gusta esta clase <strong>de</strong> enseñanza contra los falsos profetas. Vivimos en una<br />

época en que la gente dice que, con tal <strong>de</strong> que alguien profese ser cristiano, <strong>de</strong>bemos<br />

consi<strong>de</strong>rarlo como hermano y seguir juntos. Pero la respuesta es lo que dijo nuestro Señor,<br />

"Guardaos <strong>de</strong> los falsos profetas!' Estas advertencias terribles y penetrantes están en el Nuevo<br />

Testamento <strong>de</strong>bido precisamente a lo que he venido comentando. Claro que no <strong>de</strong>bemos ser<br />

hipercríticos; pero tampoco <strong>de</strong>bemos confundir la amistad y afabilidad con la santidad. No se<br />

trata <strong>de</strong> personalida<strong>de</strong>s. No <strong>de</strong>bemos <strong>de</strong>spreciar estas personas. De hecho, el Dr. Alexan<strong>de</strong>r<br />

MacLaren tiene razón cuando afirma que son hipócritas inconscientes. No es que no sean

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!