El Cielo y el Infierno
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<strong>El</strong> <strong>Ci<strong>el</strong>o</strong> y <strong>el</strong> <strong>Infierno</strong> o la Justicia Divina según <strong>el</strong> Espiritismo - Allan Kardec<br />
11. La expiación varía según la naturaleza y gravedad de la falta. Así es como la misma falta<br />
puede dar lugar a expiaciones diferentes, según las circunstancias atenuantes o agravantes en que se<br />
cometió.<br />
12. No hay ninguna regla absoluta y uniforme en cuanto a la naturaleza y duración d<strong>el</strong><br />
castigo. La única ley general es que toda falta recibe su castigo, y toda acción buena se<br />
recompensa, según su valor.<br />
13. La duración d<strong>el</strong> castigo está subordinada a la mejora d<strong>el</strong> espíritu culpable. No se<br />
pronuncia contra él ninguna condena por un tiempo determinado. Lo que Dios exige para poner<br />
término a los sufrimientos es una mejora seria, efectiva, y una vu<strong>el</strong>ta sincera al bien.<br />
Una condena por un tiempo determinado cualquiera tendría dos inconvenientes: <strong>El</strong> de seguir<br />
castigando al espíritu que se mejoró, o cesar cuando éste perseverase en <strong>el</strong> mal. Dios, que es justo,<br />
castiga <strong>el</strong> mal mientras existe, cesa de castigar cuando <strong>el</strong> mal no existe. 2 O si se quiere, siendo <strong>el</strong><br />
mal moral por sí mismo una causa de sufrimiento, éste dura tanto tiempo como <strong>el</strong> mal subsiste. Su<br />
intensidad disminuye a media que <strong>el</strong> mal se debilita.<br />
2. Véase Cáp. VI, n.º 25, cita de Ezequi<strong>el</strong>.<br />
14. Estando subordinada la duración d<strong>el</strong> castigo a la mejora, resulta de <strong>el</strong>lo que <strong>el</strong> espíritu<br />
culpable que no se mejorara nunca, sufriría siempre, y que para él la pena sería eterna.<br />
15. Una condición inherente a la inferioridad de los espíritus es la de no ver <strong>el</strong> término de su<br />
situación y creer que sufrirán siempre. Para <strong>el</strong>los es un castigo que les parece que debe ser eterno. 3<br />
3. Perpetuo es sinónimo de eterno. Dícese: “<strong>El</strong> límite de las nieves perpetuas, los hi<strong>el</strong>os eternos de los<br />
polos.” También se refiere: “<strong>El</strong> secretario perpetuo de la Academia.” Lo cual no significa que lo será<br />
perpetuamente, sino por un tiempo ilimitado. Eterno y perpetuo se emplean en <strong>el</strong> sentido de indeterminado. En<br />
esta aceptación, puede determinarse que las penas son eternas si se entiende que no tienen una duración<br />
limitada. Son eternas para <strong>el</strong> espíritu que no ve su fin.<br />
16. <strong>El</strong> arrepentimiento es <strong>el</strong> primer paso hacia la mejora. Pero no es suficiente. Son precisas<br />
aún la expiación y la reparación.<br />
Arrepentimiento, expiación y reparación son las tres condiciones necesarias para borrar las<br />
hu<strong>el</strong>las de una falta y sus consecuencias.<br />
<strong>El</strong> arrepentimiento endulza los dolores de la expiación, puesto que da la esperanza y prepara<br />
los caminos de la rehabilitación, pero sólo la reparación puede anular <strong>el</strong> efecto destruyendo la<br />
causa. <strong>El</strong> perdón es una gracia y no una anulación.<br />
17. <strong>El</strong> arrepentimiento puede tener lugar en todas partes y en cualquier tiempo. Si es tardío,<br />
<strong>el</strong> culpable sufre mucho más tiempo.<br />
La expiación consiste en los sufrimientos físicos y morales, que son consecuencia de la falta<br />
cometida, bien en esta vida o después de la muerte en la vida espiritual, o bien en una nueva<br />
existencia corporal, hasta que queden borradas las hu<strong>el</strong>las de la falta.<br />
La reparación consiste en hacer bien a aqu<strong>el</strong> a quien se hizo daño. Aqu<strong>el</strong> que no repare en<br />
esta vida las faltas cometidas por impotencia o falta de voluntad, en una posterior existencia se<br />
hallará en contacto con las mismas personas a quienes habrá perjudicado y en condiciones<br />
escogidas por él mismo que pongan a prueba su buena voluntad en hacerles tanto bien como mal les<br />
había hecho antes.<br />
Todas las faltas no ocasionan siempre un perjuicio directo y efectivo. En este caso, la<br />
reparación se verifica haciendo aqu<strong>el</strong>lo que debía hacerse y no se ha hecho, cumpliendo los deberes<br />
descuidados o desconocidos, las misiones en que ha faltado, etc. En fin, practicando <strong>el</strong> bien en<br />
contra d<strong>el</strong> mal hecho anteriormente, siendo humilde si antes se fue orgulloso, dulce si se fue duro,<br />
caritativo si se fue egoísta, benévolo si se fue malévolo, laborioso si se fue perezoso, útil si se fue<br />
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