Psicometria-Menesesetal
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Editorial UOC 47 Capítulo I. Aproximación histórica y conceptos...
te los objetos, bien para cuantificar un atributo físico mediante su observación
directa, bien para establecer funciones matemáticas que relacionen otros atributos
observables. En la medida en que los fenómenos psicológicos no pueden ser
observados ni manipulados empíricamente, ni son producto de una relación
entre otros atributos observables, la medida indirecta que persigue la psicometría
no sería equiparable a la medida fundamental o derivada de la física y, por
lo tanto, resultaría inviable. Esta fue la conclusión de la comisión organizada
por la British Association for the Advancement of Science, que, como ya hemos
comentado, lejos de cerrar la controversia se convirtió en uno de los debates
más importantes para la medida indirecta de los fenómenos psicológicos mediante
tests.
Como respuesta a las restricciones impuestas por el modelo general de medida
desarrollado en la física, la psicometría avanzó en el debate sobre la aproximación
indirecta a los fenómenos psicológicos desarrollando sus propias teorías
y modelos de medida. A pesar de que otros autores utilizan otros términos (por
ejemplo, podéis ver Fraser, 1980, Swistak, 1990 o Hand 1996), en este texto seguiremos
a Michell (1986) y los denominaremos modelo representacional, operacional
y clásico. A continuación, caracterizaremos estos modelos y analizaremos
brevemente las diferencias en su planteamiento del proceso de medida para hacerlo
extensivo a los fenómenos psicológicos. Siendo un debate todavía abierto,
y susceptible a diferentes interpretaciones según los diferentes autores, optamos
por la exposición de Michell en cuanto que plantea, desde una visión crítica, las
incógnitas más importantes que la psicometría debe resolver en su construcción
como disciplina científica 6 .
En primer lugar, el modelo representacional fue desarrollado a partir de los trabajos
de Stevens (1946) y Suppes (1951), y define la medida como el proceso de
asignación de números a objetos a partir de unas reglas, de modo que reflejen
relaciones empíricas entre los objetos. Estas relaciones, de manera comparable
al modelo de Campbell, quedarían representadas por las propiedades de los números,
pero no se centrarían exclusivamente en la aditividad. De hecho, Stevens
abrió la puerta a otros tipos de relaciones para llevar a cabo la medida, aceptando
por ejemplo la equivalencia o el orden. Medir no sería únicamente cuantifi-
6. El lector interesado puede encontrar una discusión mucho más amplia de la que podemos
plantear en este texto en Michell (1999).