22.04.2013 Views

Coetzee, J.M. – Infancia

Coetzee, J.M. – Infancia

Coetzee, J.M. – Infancia

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

cargados de amenazas y de palabrería acerca de Dios.<br />

No llegan a la guerra de los bóers en el colegio, al menos no en las<br />

clases inglesas de educación básica. Hay rumores de que la guerra de<br />

los bóers se enseña en las clases de los afrikaners con el nombre de<br />

Tweede Vryheidsoorlog, la segunda guerra de liberación, pero sin que<br />

entre en examen. Como es un tema delicado, la guerra de los bóers no<br />

está oficialmente en el programa. Ni siquiera sus padres hablan de la<br />

guerra de los bóers, de quién tenía razón y de quién no. Sin embargo,<br />

su madre repite una historia sobre la guerra de los bóers que le contó<br />

su propia madre. Cuando los bóers llegaron a su granja, contaba su<br />

abuela, pidieron comida y dinero y esperaban ser servidos. Cuando<br />

llegaron los soldados británicos, durmieron en el establo, no robaron<br />

nada, y antes de irse agradecieron cortésmente su hospitalidad.<br />

Los británicos, con sus generales arrogantes y altaneros, son los<br />

villanos de la guerra de los bóers. Y encima son estúpidos, por llevar<br />

uniforme rojo que los convertía en un blanco fácil de los tiradores<br />

bóers. En los cuentos de la guerra se supone que hay que estar de<br />

parte de los bóers, que lucharon por su libertad contra el poderío del<br />

imperio británico. Sin embargo, él prefiere que no le gusten los bóers,<br />

no solo por sus largas barbas y sus ropas feas, sino por agazaparse<br />

entre las rocas y disparar emboscados, y que le gusten los británicos,<br />

por marchar hacia la muerte al son de las gaitas.<br />

En Worcester los ingleses son una minoría, en Reunion Park una<br />

minoría insignificante. Excepto él y su hermano, que son ingleses solo<br />

en parte, hay únicamente dos chicos ingleses: Rob Hart y un chico<br />

pequeño y extraño llamado Billy Smith cuyo padre trabaja en los<br />

ferrocarriles y que tiene una enfermedad que hace que su piel se<br />

desprenda en escamas (su madre le prohíbe tocar a todos los niños<br />

Smith).<br />

Cuando deja caer que a Rob Hart lo azota la señorita Oosthuizen, sus<br />

padres parecen saber de antemano por qué. La señorita Oosthuizen es<br />

del clan de los Oosthuizen, que son nacionalistas; el padre de Rob Hart,<br />

que tiene una ferretería, fue concejal de la ciudad por el Partido Unido<br />

hasta las elecciones de 1948.<br />

Sus padres sacuden la cabeza cuando se habla de la señorita<br />

Oosthuizen. La ven nerviosa, inestable; no les hace gracia su pelo<br />

teñido con alheña. Con Smuts, dice su padre, se habrían tomado<br />

medidas con una profesora que mezcla la política con la enseñanza. Su<br />

padre también es del Partido Unido. De hecho, su padre perdió su<br />

trabajo en Ciudad del Cabo, el trabajo que tenía un nombre del que su<br />

madre estaba tan orgullosa <strong>–</strong>«interventor de alquileres»<strong>–</strong>, cuando

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!