22.04.2013 Views

Coetzee, J.M. – Infancia

Coetzee, J.M. – Infancia

Coetzee, J.M. – Infancia

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

icicletas, cuidándose de echar a correr por miedo a que el perro los<br />

persiga ladrando y babeando. No pueden decir nada para compensar lo<br />

ocurrido. Los afrikaners ni siquiera se han portado mal. Son ellos los<br />

que han perdido.<br />

10<br />

Temprano, a primera hora de la mañana, hay niños de color que corren<br />

por la carretera nacional con estuches y libros de ejercicios, algunos<br />

incluso con carteras a la espalda, de camino al colegio. Pero son niños<br />

pequeños, muy pequeños: cuando tengan su edad, diez u once años,<br />

tendrán que dejar el colegio y salir al mundo para ganarse el pan de<br />

cada día.<br />

En su cumpleaños, en lugar de hacerle una fiesta, le dan diez chelines<br />

para que convide a sus amigos. Invita a sus tres mejores amigos al café<br />

Globe; se sientan a una mesa alta de mármol y piden banana split y<br />

helado de crema bañado de chocolate. Se siente como un príncipe,<br />

dispensando placer; la ocasión sería memorable del todo si no la<br />

estropearan los niños de color andrajosos que se pegan a la ventana<br />

para observarlos.<br />

En las caras de estos niños él no percibe el odio que, lo admite, él y sus<br />

amigos merecen por tener tanto dinero mientras que ellos no tienen ni<br />

un penique. Por el contrario, son como los niños que van al circo y se<br />

tragan el espectáculo completamente absortos, sin perderse nada.<br />

Si fuera otra persona, le pediría al propietario del Globe, un portugués<br />

con el pelo engominado, que los echara. Es muy común expulsar a los<br />

niños mendigos. Solo hay que arrugar la cara, fruncir el ceño y agitar<br />

los brazos gritando «Voetsek, hotnot! Loop! Loop!» (¡Fuera, negros!<br />

¡Idos! ¡Marchaos!), y después volverse a cualquiera que esté mirando,<br />

amigo o extraño, y explicar: «Halle sock net iets om te steel. Holle is<br />

alrnnl skelrns» (Solo quieren robar. Son todos unos ladrones). Pero si<br />

se levantara para hablar con el portugués, ¿qué le diría: «Están<br />

estropeando mi cumpleaños, no es justo, me hiere verlos»? Pase lo que<br />

pase, tanto si los echa como si no, es demasiado tarde, su corazón ya<br />

está herido.<br />

Ve a los afrikaners como una gente siempre llena de rabia porque<br />

tienen el corazón herido. Ve a los ingleses como una gente que no cae<br />

en la rabia porque vive detrás de muros y protege bien su corazón.<br />

Esta es solo una de sus teorías sobre los ingleses y los afrikaners. La<br />

excepción a la regla, por desgracia, es Trevelyan.<br />

Trevelyan fue uno de los inquilinos que hospedaron en la casa de

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!