06.05.2013 Views

UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com

UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com

UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Digitalizado por kamparina para Biblioteca-irc en Enero de 2.004<br />

http://biblioteca.d2g.<strong>com</strong><br />

3<br />

LA ENFERMERA HOPKINS<br />

Hércules Poirot tomó asiento en la salita de la casa de la enfermera<br />

Hopkins.<br />

El doctor Lord le había a<strong>com</strong>pañado hasta allí y, después de hacer las<br />

presentaciones, salió a una seña del detective y dejó solos a los dos<br />

interlocutores.<br />

Después de escrutar detenidamente la extraña figura del detective, la<br />

enfermera empezó a decir:<br />

—Sí. Ha sido una cosa terrible. Lo más terrible que he conocido en mi<br />

vida. Mary era una de las criaturas más preciosas que han existido en<br />

este mundo. ¡Tal vez hubiese llegado a ser artista de cine si se lo<br />

hubiese propuesto! Y, además de eso, era una muchacha formal y<br />

poco orgullosa, a pesar de lo que podía reservarle el futuro.<br />

Poirot intervino, lanzándose a fondo:<br />

—¿Quiere usted dar a entender lo que le reservaba mistress Welman?<br />

—Sí. La anciana se había encaprichado de la pobre niña. Llegó a<br />

tomarle un cariño tremendo.<br />

—¿Era sorprendente ese cariño?<br />

—Eso depende... En realidad..., era natural... Quería decir... —la<br />

enfermera se mordió los labios. Parecía confundida—. Quería decir<br />

que Mary supo atraerse aquel sentimiento... Poseía una voz dulce y<br />

agradables modales... Y, según mi opinión, a las ancianas les agrada<br />

en cierto modo la presencia de rostros jóvenes.<br />

Hércules Poirot dijo:<br />

—¿Venía miss Carlisle con alguna frecuencia a ver a su tía?<br />

La enfermera repuso con sequedad:<br />

—¡Miss Carlisle venía cuando le parecía bien!<br />

Poirot murmuró:<br />

—No le es simpática miss Carlisle, ¿verdad?<br />

La enfermera Hopkins exclamó:<br />

—¿Cómo quiere que me sea simpática una envenenadora?...<br />

Hércules Poirot le interrumpió:<br />

—Veo que está usted convencida.<br />

La enfermera le miró con suspicacia.<br />

—¿Qué quiere usted?... ¿Que oculte mi pensamiento?<br />

—¿Está usted segura de que fue ella la que administró la morfina a<br />

Mary Gerrard?<br />

—¡Dígame usted quién pudo ser, si no! ¿Se atreve a insinuar que fui

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!