UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
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Digitalizado por kamparina para Biblioteca-irc en Enero de 2.004<br />
http://biblioteca.d2g.<strong>com</strong><br />
Welman o quizá Mary Gerrard?<br />
—Sería posible, ¿no es verdad?<br />
La enfermera movió negativamente la cabeza. Dijo:<br />
—¡Ninguno de ellos se hubiera atrevido!<br />
El detective murmuró lentamente:<br />
—Tal vez no —añadió—. ¿Cuándo echó de menos el tubo de morfina<br />
la enfermera Hopkins?<br />
—Aquella misma mañana. «Estoy segura de que lo tenía aquí»,<br />
fueron sus palabras. Estaba muy segura al principio; pero usted sabe<br />
lo que ocurre: al cabo de un rato entra la confusión, y, al fin, ella<br />
declaró estar segura de haberlo dejado en casa.<br />
Poirot murmuró:<br />
—¿Y entonces no tuvo usted ninguna sospecha?<br />
—¡En absoluto! No se me ocurrió que pudiera suceder alguna cosa<br />
anormal. Aun ahora, la Policía tiene tan sólo una sospecha.<br />
—Al pensar en aquel tubo de morfina desaparecido, ¿ni usted ni miss<br />
Hopkins se intranquilizaron un momento?<br />
—Verá usted. Recuerdo lo que hablamos miss Hopkins y yo en el café<br />
de El Caballito Azul, donde nos encontrábamos en aquel momento:<br />
«Sólo pudo ser que al dejarlo en la repisa de la chimenea cayera al<br />
cubo de la basura, ¿no es verdad?», me dijo. «Seguramente eso es lo<br />
que ha sucedido», le contesté. Y ninguna de las dos mencionamos lo<br />
que nos preocupaba ni los temores que sentíamos.<br />
Hércules Poirot preguntó:<br />
—¿Y qué piensa usted ahora?<br />
La enfermera contestó:<br />
—Si encuentran morfina en su cuerpo, no habrá duda de que quién<br />
tomó aquel tubo, ni de para qué se usó; aunque no creeré que ella<br />
envenenara a la anciana señora hasta que se demuestre que<br />
verdaderamente hay morfina en su cuerpo.<br />
Poirot dijo:<br />
—¿No tiene usted ninguna duda de que Elinor Carlisle matara a Mary<br />
Gerrard?<br />
— En mi opinión, ninguna. ¿Quién más podía tener una razón para<br />
ello o desearlo?<br />
—Ésa es la cuestión —dijo Poirot.<br />
La enfermera O'Brien continuó en tono dramático:<br />
—¿No me encontraba presente la noche en que la señora intentaba<br />
hablar y miss Elinor le prometió que todo se haría según sus deseos?<br />
¿No vi su rostro y el odio que se reflejaba en él cuando siguió con la<br />
mirada a Mary mientras bajaba la escalera? Sí, el crimen anidaba en<br />
su corazón en aquel momento.<br />
Poirot preguntó:<br />
—Si Elinor Carlisle mató a mistress Welman, ¿por qué lo hizo?<br />
—¿Por qué? Por el dinero, desde luego. Nada menos que doscientas