UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Digitalizado por kamparina para Biblioteca-irc en Enero de 2.004<br />
http://biblioteca.d2g.<strong>com</strong><br />
Poirot sonrió:<br />
—¡Siempre es agradable saber las mentiras que nos cuentan!<br />
—¿Le mintió Welman?<br />
—En efecto.<br />
—¿Quién más le ha mentido?<br />
—Todos, me parece. La enfermera O'Brien, románticamente. La<br />
Hopkins, con obstinación. Mistress Bishop, con mala intención. Usted<br />
mismo...<br />
—¡Santo Dios! —le interrumpió el doctor, sin ceremonia—. ¿Cree<br />
usted de veras que le he mentido?<br />
—Todavía no —admitió Poirot.<br />
El doctor Lord se hundió en su asiento, y dijo:<br />
—Es usted un incrédulo incorregible, Poirot.<br />
Luego prosiguió:<br />
—Si ha terminado usted..., ¿qué le parece si fuéramos a<br />
Hunterbury?... Tengo algunos enfermos por allí y he de asistir a la<br />
clínica.<br />
—Estoy a su disposición, amigo mío.<br />
Emprendieron la marcha y se adentraron en los terrenos de<br />
Hunterbury por la parte trasera. A la mitad del camino encontraron<br />
un joven alto y bien parecido que empujaba una carretilla. Se quitó la<br />
gorra respetuosamente al ver al doctor Lord.<br />
—Buenos días, Horlick. Éste es Horlick, el jardinero, Poirot. Estaba<br />
trabajando aquí aquella mañana.<br />
Horlick declaró:<br />
—En efecto, señor. Vi a miss Elinor también y estuve hablando con<br />
ella...<br />
Poirot preguntó:<br />
—¿Qué le dijo ella?<br />
—Me dijo que ya casi había vendido la casa, y yo me llevé un<br />
disgusto... Pero la señorita me aseguró que me re<strong>com</strong>endaría al<br />
mayor Somervell y que él me conservaría a su servicio, si no le<br />
parecía demasiado joven..., pues yo le dije que desearía continuar de<br />
primer jardinero..., ya que he trabajado bastante tiempo con mister<br />
Stephens...<br />
El doctor Lord preguntó:<br />
—¿Notó usted en ella algo extraño?<br />
—No... Es decir, sí... Parecía muy excitada..., <strong>com</strong>o si tuviera algo en<br />
su pensamiento.<br />
Hércules Poirot preguntó a su vez:<br />
—¿Conocía usted a Mary Gerrard?<br />
—Sí, señor...; pero no muy bien.<br />
Poirot inquirió:<br />
—¿Cómo era?<br />
Horlick parecía perplejo: