UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
UN TRISTE CIPRÉS Agatha Christie - GutenScape.com
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Digitalizado por kamparina para Biblioteca-irc en Enero de 2.004<br />
http://biblioteca.d2g.<strong>com</strong><br />
Espero que no querrás que acepte una limosna.<br />
Elinor exclamó:<br />
—¡Roddy!<br />
Él hizo un rápido gesto.<br />
—¡Ah!, perdona, querida, lo siento. No sé lo que me digo. Estoy tan<br />
desconcertado, tan desorientado.<br />
Elinor murmuró suavemente:<br />
—¡Pobre Roddy!...<br />
Él había vuelto la cara del otro lado nuevamente y jugueteaba con la<br />
borla de los visillos. En tono indiferente, preguntó:<br />
—¿Sabes tú lo que Mary Gerrard se propone hacer?<br />
—Piensa aprender a dar masajes, según me ha dicho.<br />
—¡Ya!<br />
Hubo un silencio. Elinor se irguió; inclinó hacia atrás la cabeza. Su<br />
voz sonaba imperiosa cuando le dijo:<br />
—Roddy, quiero que me escuches con atención.<br />
Él se volvió hacia ella, ligeramente sorprendido.<br />
—Desde luego, Elinor.<br />
—Quiero que hagas el favor de seguir mi consejo.<br />
—¿Y cuál es tu consejo?<br />
Elinor repuso con toda calma:<br />
—No estás muy atado. Puedes permitirte unas vacaciones siempre<br />
que quieras, ¿no es verdad?<br />
—¡Oh, sí!<br />
—Entonces..., hazlo. Márchate a alguna parte, al extranjero, por,<br />
digamos, tres meses. Vete solo. Traba nuevas amistades y visita<br />
nuevos lugares. Hablemos con franqueza. En este momento crees<br />
que estás enamorado de Mary Gerrard. Quizá lo estés. Pero no es el<br />
instante de abordarla, tú lo sabes tan bien <strong>com</strong>o yo. Nuestro<br />
<strong>com</strong>promiso queda roto. Vete al extranjero, pues, <strong>com</strong>o un hombre<br />
libre, y al cabo de tres meses, <strong>com</strong>o un hombre libre, puedes<br />
decidirte. Entonces sabrás mejor si realmente amas a Mary o si se<br />
trata tan sólo de un capricho pasajero. Y si entonces estás<br />
<strong>com</strong>pletamente seguro de que la amas, vuelve y dile que estás<br />
seguro de no equivocarte, y quizá ella te escuche entonces.<br />
Roddy se aproximó a Elinor. Le cogió una mano.<br />
—¡Elinor, eres maravillosa! ¡Tienes un cerebro tan claro! ¡Eres tan<br />
impersonal! No eres mezquina. Te admiro más de lo que puedes<br />
imaginarte. Haré al pie de la letra lo que me sugieres. Me marcharé,<br />
me apartaré de todo y <strong>com</strong>probaré si realmente estoy enamorado o<br />
he estado haciendo el idiota. ¡Oh, Elinor! Realmente, no sabes cuánto<br />
te aprecio. Me doy perfecta cuenta de que siempre eres mil veces<br />
demasiado buena para mí. Dios te bendiga, querida, por tus<br />
bondades.<br />
Rápida, impulsivamente, la besó en una mejilla y salió del aposento.