Eve (Junior - Juvenil (roca)) (Spanish Edition) - deviantART
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se apretujaban los restantes chicos a los que el alboroto había despertado.<br />
Kevin se recolocó sus gafas rotas, como si quisiera cerciorarse de lo que<br />
estaba viendo.<br />
Leif, con los brazos en jarras, dio vueltas alrededor de Caleb. La<br />
persona que se había sentado a mi lado en el taburete del piano, disfrutando<br />
con la música, ya no existía. Algo se había apoderado de él, algo aterrador y<br />
primitivo.<br />
—Venga —repitió acercando la cara a la de su oponente—. Ahora<br />
tienes ocasión de convertirte en un hombre.<br />
Caleb se abalanzó sobre él. Con un veloz movimiento le agarró el<br />
brazo, se lo retorció y lo tumbó al suelo. Leif cayó como un peso muerto y, al<br />
golpearse la mejilla contra el entarimado, sonó un horrible ¡crac! Un charco<br />
de sangre se esparció por debajo de su cara y, a pesar de la oscuridad, vi que<br />
tenía un labio roto.<br />
—Ella quería estar conmigo. —Escupía sangre al hablar, cubriendo el<br />
suelo de gotas sanguinolentas—. ¿Por qué crees que se sentó a mi lado hace<br />
un rato? ¿Por qué piensas que hablaba conmigo? Me quería a mí. A mí, no a<br />
ti. —Había una mezcla de certidumbre y rabia en su voz. Me escabullí<br />
todavía más y me acurruqué contra la pared, temiéndolo incluso en aquel<br />
momento, en que era un cuerpo sin fuerzas tirado en el suelo.<br />
Caleb me miró, contrayendo el rostro ante la confusión, e inquirió:<br />
—¿Es eso cierto?<br />
Me temblaban violentamente las manos y no pude reprimir un mar de<br />
lágrimas. Lo que Leif había hecho era horrible. Y sin embargo…, me había<br />
sentado junto a él al piano y había tocado una canción; había permitido que<br />
su hombro rozase el mío mientras me hablaba de su familia, y consentido<br />
que me cogiese la mano. ¿Acaso le había ofrecido una invitación tácita, o mi<br />
amabilidad se había confundido con otra cosa?<br />
—No lo sé —respondí cubriéndome la boca con la mano.<br />
—¿Cómo que no lo sabes? —insistió Caleb. Estrujó el brazo de Leif,<br />
aplastándolo contra el suelo, y me lanzó una mirada fulminante; la<br />
delicadeza que tanto me gustaba le había desaparecido del rostro. Deseaba<br />
que se callase, que mirase hacia otro lado, que me diese un momento de<br />
respiro.<br />
No obstante, continuaba sin apartar la vista de mí, esperando una<br />
respuesta. Sollocé, pero me ahogaba a consecuencia del incontenible llanto.<br />
—¡<strong>Eve</strong>! ¿Qué ha ocurrido? ¿Estás bien? —Arden se abrió paso entre el<br />
grupo de chicos y se me aproximó corriendo. Me levantó del suelo,<br />
sujetándome por un pequeño roto del jersey—. Oí ruidos y… —Se calló al ver<br />
la expresión de Caleb. Movió la cabeza de un lado para otro de forma casi<br />
imperceptible, con un gesto que equivalía a un rotundo «no».