Eve (Junior - Juvenil (roca)) (Spanish Edition) - deviantART
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«Sigue —me dije—. Sigue adelante.»<br />
Enseguida salí del bosque y me encontré en campo abierto, que era<br />
una densa extensión de flores silvestres. La luz estaba mucho más lejos de lo<br />
que había calculado: a casi cien metros, bajo las imponentes montañas.<br />
Las pisadas de Fletcher resonaban en las piedras al cruzar el bosque,<br />
al tiempo que gritaba con más furia:<br />
—¡Cerda asquerosa! No creas que me vas a engañar.<br />
Di una ojeada alrededor: a la izquierda se alzaban los gigantescos<br />
riscos, dándome la espalda, y una carretera de arena serpenteaba a la<br />
derecha. Delante de mí había más árboles, pero aunque corriese como una<br />
desesperada no podría evitar que Fletcher me alcanzase. Mi único escondite<br />
era el tupido manto de flores, cuyos delicados brotes apenas medían unos<br />
centímetros.<br />
Me tiré al suelo, y mis dedos aplastaron los capullos azules y dorados.<br />
Entonces me puse de lado, tratando de esconderme entre los tallos. Cuando<br />
levanté un poco la cabeza, vislumbré a Fletcher junto a los árboles: le<br />
sangraba una brecha en la frente.<br />
Dio la vuelta y escupió.<br />
—¡Sal, sal de ahí, dondequiera que estés! —Amartilló la pistola, y se<br />
me pusieron los pelos de punta.<br />
Mientras él avanzaba por el campo, me pegué todavía más al suelo,<br />
deseando que se abriese y me tragase. Mi perseguidor caminaba despacio,<br />
apartando las flores que le llegaban a la altura de la rodilla, y apuntando la<br />
pistola hacia el claro; a cada paso aplastaba los capullos. Cuando estuvo<br />
apenas a dos metros de mí, miró adonde yo estaba con gesto confuso y ladeó<br />
la cabeza, como si no supiera si yo era una sombra o no.<br />
Permanecí inmóvil, sin atreverme a respirar, y hundí los dedos en la<br />
tierra. El sudor me resbalaba por la espalda; no me llegaba el aire a los<br />
pulmones.<br />
Tras pensarlo bien, dio la vuelta y se alejó.<br />
Cerré los ojos, aliviada porque no me había visto, y porque al menos<br />
Lark y Arden disponían de un minuto más para escapar. Me tumbé boca<br />
arriba entre las flores, respirando hondo, pero una ramita se partió debajo<br />
de mí. ¡Crac!<br />
Fletcher giró en redondo, y exclamó:<br />
—¡Hola, muñeca!<br />
Me levanté antes de que me apuntase con la pistola. El primer disparo<br />
zumbó junto a mí, y corrí, con el corazón a punto de estallar. El viento rugía<br />
en mis oídos. Sonó otro disparo que partió un árbol a lo lejos. Seguí<br />
corriendo, sin mirar hacia atrás, mientras él seguía disparando. De repente