Eve (Junior - Juvenil (roca)) (Spanish Edition) - deviantART
Eve (Junior - Juvenil (roca)) (Spanish Edition) - deviantART
Eve (Junior - Juvenil (roca)) (Spanish Edition) - deviantART
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
sobre el colchón. A su lado había un plato lleno de verduras de la noche<br />
anterior.<br />
—¿Qué le ocurrió? ¿Se puso enfermo? —Las palabras me quemaban<br />
la garganta mientras contemplaba a mi amiga.<br />
—Había empezado a cazar. Caleb dijo que había sido una riada<br />
repentina. —Al hablar, hojeaba las páginas del cuaderno cubiertas de<br />
trémulos garabatos—. Paul me cuidó cuando nuestros padres<br />
desaparecieron, y me trajo aquí.<br />
—Lo siento —dije.<br />
—No sé por qué todo el mundo dice lo mismo. —Los ojos le destellaron<br />
cuando me miró—. No es culpa tuya.<br />
—Supongo… —Pensé en las visiones que acudían a mi mente cuando<br />
me dormía: veía a Pip en una estrecha cama blanca con el vientre hinchado;<br />
a veces se retorcía para soltarse las correas y gritaba a las otras chicas que<br />
estaban junto a ella, buscando manos que no podía tocar. Otras veces se me<br />
representaba tal como la recordaba: haciendo problemas de matemáticas en<br />
su mesa mientras tamborileaba con el bolígrafo sobre el tablero. Pero, de<br />
pronto, se volvía con un gesto de furia, exponiendo su protuberante perfil de<br />
embarazada, y preguntaba, acercándoseme: «¿Por qué sucede esto? ¿Por<br />
qué?». Y yo repetía siempre las mismas palabras: «Lo siento mucho, lo siento<br />
mucho…», hasta que se abalanzaba sobre mí, y entonces me despertaba.<br />
Carraspeé buscando los ojos del niño, y le expliqué:<br />
—Es como decir «estoy triste», o «me duele tanto como a ti». Tal vez sea<br />
una tontería, pero es lo que se le ocurre decir a la gente…<br />
El niño me observó, fijándose en el cabello que me caía sobre los<br />
hombros, con las puntas abiertas. Lo peinaba con los dedos para que no se<br />
me enredase.<br />
—Me dijeron que eres una chica —comentó.<br />
Hice un gesto afirmativo.<br />
—¿Eres mi madre?<br />
—No. No soy tu madre.<br />
Nos quedamos en silencio. El niño se pellizcó la piel partida de los<br />
labios.<br />
—Me llamo Benny —dijo al fin, yendo hacia la entrada—. ¿Quieres ver<br />
mi habitación? Te presentaré a mi compañero de cuarto, Silas.<br />
Dudé un instante. Volví a mirar a Arden: estaba hecha un ovillo, con<br />
los ojos cerrados, en la misma postura que la noche anterior.<br />
—De acuerdo —le respondí, contenta de tener a alguien con quien<br />
hablar—. ¡Vamos!